Fabiana Sosa de 39 años describió el terror que vivió ayer al ser secuestrada en pleno centro de Posadas junto a su bebé, al que lo recuperó tras pagar 3.000 pesos. La policía busca a los delincuentes -dos hombres y una mujer- que se movilizaban en un Peugeot 307 plateado con vidrios polarizados, cuyos identikit fueron confeccionados con datos aportados por la víctima. Sosa relató que en la esquina de Tucumán y Ayacucho fue obligada por un hombre de unos 27 años aproximadamente, bien vestido que le apuntaba con un arma, a subir junto a su bebé a un auto, donde había otro hombre y una mujer que actuaban a cara descubierta.
Fabiana Sosa continuó diciendo que «un hombre bien vestido me dijo no hagas nada, subí al auto, donde había un joven vestido con una chomba clarita, además tenía el cabello con reflejos y también estaba una mujer morocha con cabellos ondulados». Sosa aclaró que el sujeto que la intimidaba «actuaba con total tranquilidad, no hablaba y hasta parecía que me estaba acompañando».
Sosa siguió contando en LT 17 que, por datos que le dio a la Brigada de Investigación, se trataba de un Peugeot 307 color plateado, con la chapa patente en trámite y tenía los vidrios polarizados. «Cuando me subieron al auto, la mujer me sacó a mi bebé y me llevaron por todos lados. El tipo que manejaba hablaba por celular manos libres, su acompañante fumaba algo con un olor raro y la mujer tenía un bolsoncito rosado, y decía que se equivocaron de paquete».
El conductor del vehículo que le había intimidado con el arma pone en marcha y pone a circular por diferentes calles que no recuerda, sí recuerda el comentario de la mujer y le dice al conductor que «no es una beba, es un chaboncito», es el término que había utilizado en lugar de un bebé.
«Mientras me llevaban yo les decía que no me iban a poder sacar mi bebé, porque tengo conocidos en el Arco y además tengo parientes en Paraguay. Entonces me pedían plata, me preguntaban si no conocía a alguien para pedirle dinero», prosiguió.
Sosa al notar que querían un bebé varón comenzó a rogar que no lleven a la criatura por que podía darles dinero, y los delincuentes aceptan el ofrecimiento y la trasladan hasta cerca del domicilio de ella en el barrio Itaembé, le permiten bajar del vehículo y regresar con un ahorro de un préstamo, entregándoles 3 mil pesos, todos billetes de 100 pesos, una vez que toman el dinero los delincuentes emprenden la marcha en el vehículo trayéndola hasta el centro de la ciudad.
«Después de casi dos horas, me abandonaron con mi bebé cerca del Parque Paraguayo, donde corrí descalza unas cuadras y nadie me hacía caso en pleno centro. Después apareció un señor que me atendió y llamó al Comando».
En tanto en la comisaría primera, después de recibir la denuncia de la señora fue trasladada a la dirección de Investigaciones, donde en un reconocimiento de fotografías no pudo identificar a sus captores, por lo que fueron confeccionados identikits de los mismos.
En tanto un agente la acompañó hasta el lugar donde hacías compras y vieron filmaciones de la casa comercial, donde tampoco hubo identificaciones.
