Se trata de un niño de 11 años, y lo encontraron en cercanías de un lugar conocido como «Puente Negro». El niño fue visto por última vez el viernes y apareció ayer lunes. El pasado domingo, Rosana Elizabeth Fernando (29) domiciliada en barrio Los Paraísos, denunció en la comisaría 10º que el viernes último, tres de sus hijos se habían ido a la casa de su hermano Omar Enrique Fernando, ubicada en calle MalvinasArgentinas casi Cabo Cuenca del barrio Miguel Lanús.
Los menores debían regresar el domingo por la tarde, pero solo
lo hicieron dos de ellos una nena de 12 y el hermano 8 años,faltando el varón de 11 años.
La madre interrogó a los chicos y se enteró que el de 11 años cerca
de las 10:30 , se fue con otros dos chicos del barrio, uno de 15 y
otro menor rumbo al río a buscar frutos de mango, volviendo a las 3 o 4
horas solamente dos de ellos, menos su hijo de 11 años.
Tras esto, una comisión policial se entrevistó con el joven de 15 quien
acompañó a los uniformados para indicar el sector del río donde
estuvieron con el desaparecido, manifestando que por el camino
encontraron una canoa escondida entre los arbustos, subiéndose a esta,
desplazándose varios metros, siendo interceptados por una segunda canoa
con dos sujetos, conociendo a uno de ellos por el nombre de Jorge, quien
al verlos comenzó a gritarles, acusándolos de haber sustraído la canoa,
llegando a agredir al de 15 con dos golpes, ante tal circunstancias el
joven de 11 años se asustó y saltó de la embarcación donde fue visto por
última vez.
Se inició la búsqueda del menor con todas las divisiones de la unidad
regional X y colaboración de la Prefectura Naval Argentina durante toda
la madrugada, en cuyo ínterin una comisión policial dio con el sujeto que
habría agredido a los jóvenes, identificado como Jorge Alberto Méndez
(26).
Durante el día se realizó la búsqueda de forma terrestre, fluvial y aérea.
Ayer lunes el niño fue hallado en cercanías del «Puente Negro».Una patrulla fue al lugar y condujo al menor a la dependencia donde fue examinado por el médico policial quien expidió un diagnóstico con excoriaciones lineales múltiples en tórax y abdomen.
Luego de los trámites legales y de rigor el chico fue entregado a sus
padres, en tanto que el ciudadano Méndez fue puesto a disposición de la
justicia, continuándose con las investigaciones a fin de esclarecer
totalmente las circunstancias de lo ocurrido.