San Pablo. Brasil decidió construir dos plantas hidroeléctricas con Bolivia y la Argentina, informó ayer su ministro de Energía. «La decisión política ha sido tomada. Estamos estudiando cuándo serán construidas», señaló a periodistas el ministro de Energía, Edson Lobao, en Río de Janeiro.
«A partir de esa reunión nosotros (brasileños) vamos a estar a cargo de los aspectos estadísticos y de los aspectos necesarios para viabilizar los proyectos», precisó.
Las dos plantas tendrán una capacidad combinada de 12.000 megavatios, detalló Lobao, y agregó que ministros de los tres países involucrados se reunirán durante este mes para discutir los planes.
Brasil está construyendo actualmente dos grandes plantas hidroeléctricas sobre el río Madeira, cerca de la frontera con Bolivia.
El Gobierno se vio obligado a poner en servicio plantas termoeléctricas alimentadas a fuel oil en enero último, para reducir el riesgo de una interrupción del servicio eléctrico debido a niveles insuficientes de agua en las reservas del país.
La energía hidroeléctrica es la principal fuente de electricidad de Brasil.
El ministro habló con periodistas sobre los proyectos de cogeneración de energía con los países vecinos durante la toma de posesión del cargo del nuevo presidente del gigante eléctrico estatal Eletrobras, José Antonio Muniz.
Lobao dijo que aunque en un primer momento los proyectos eléctricos con Brasil solo involucran a Argentina y Bolivia, se podrían sumar otros países que lleguen a interesarse.
Brasil lleva a cabo dos grandes proyectos hidroeléctricos con inversiones por unos once mil millones de dólares para generar unos 8.000 megawatios en el estado de Rondonia, muy cerca de la frontera con Bolivia.
Durante una visita oficial a Buenos Aires en febrero pasado, Lula firmó con Fernández varios acuerdos de cooperación energética, que incluyen la posibilidad de construir la represa de Garabí.
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