La Nación dispuso que las ventas al exterior de naftas y gasoil se mantengan interrumpidas hasta que las petroleras entreguen un abastecimiento normal y a precios de octubre, a todas las estaciones del país Las constantes quejas de propietarios de estaciones de servicios y distribuidores de combustibles de todo el país provocaron que la Nación adopte una medida considerada extrema por los mismos funcionarios que la anunciaron. Se trata de la suspención total de las exportaciones de hidrocarburos refinados, hasta que se restablezca el abastecimiento de gasoil y naftas a precios idénticos a los que estaban vigentes para el mercado interno el 31 de octubre pasado.
Según indicaron varios propietarios de estaciones de servicios de Misiones, la medida debería resultar efectiva para recomponer el suministro de hidrocarburos, cuya falta se hizo sentir con fuerza a partir de la segunda quincena de diciembre y se mantiene hasta la fecha.
«Al principio pensamos que se trataba de un problema temporal dado el incremento en el consumo registrado durante las fiestas, pero el desabastecimiento se agravó en los últimos días», relató Faruk Jalaf, presidente de la Cámara de Estaciones de Servicios y Afines del Nordeste (Cesane).
El comerciante eldoradense consideró que, ante la imposibilidad de vender al extranjero, a las petroleras no les quedará otra opción que ubicar su combustible en el mercado interno, aunque más no sea para recuperar la posibilidad de exportar, negocio que les resulta mucho más rentable que la venta dentro del país.
Empero, resaltó que se trata únicamente de un paliativo, ya que la solución de fondo sería invertir en exploración, única forma de ampliar la oferta de petróleo disponible en Argentina. «Si no se hace algo en cinco años vamos a tener que importar», estimó.
Control de precios
Además de normalizar el suministro, la medida dispuesta por la Nación se propone dejar sin efecto los últimos incrementos registrados en los precios tanto de las naftas como del gasoil.
La disposición determina que todos los valores se retrotraigan al 31 de octubre pasado, pero no especifica cuales son esos valores. La cuestión no resulta banal, ya que según explicaron estacioneros de la provincia «para el 31 de octubre los aumentos ya habían llegado a buena parte del interior, pero no a Buenos Aires. Entonces, si se retrotraen los precios sin equilibrarlos en un valor determinado, se mantendrán las diferencias regionales que ya existían el 31 de octubre y la reducción de precios sería importante en Capital y mucho menor en Misiones».
Si en cambio, se establece un valor fijo de referencia los precios podrían bajar hasta 20 por ciento y si ello no pasa la reducción sería mínima.
