Manifestantes marcharon ayer por las calles de Iguazú en repudio a las denuncias del obispo por desmanejos de dinero en la Pastoral Social de esa ciudad. Un poco menos de un centenar de manifestantes marcharon ayer desde la plaza San Martín de Puerto Iguazú hasta el edificio del obispado, en repudio a las denuncias del obispo Marcelo Martorell por el «desfalco descomunal» en la Pastoral Social de esa ciudad.
La manifestación contra Martorell surge luego de que el obispo de Iguazú revelara semanas atrás un documento en el que muestra el manejo de Carlos Di Marco y un grupo de allegados de los fondos de ayuda social, que fueron derivados a las campañas de Joaquín Piña y del Frente por la Dignidad. Además en el mismo escrito, el religioso describe cómo se dibujan proyectos para obtener ayuda financiera que siempre termina en un grupo cerrado de ejecutores.
Por esta razón un grupo de personas marchó por las calles de Iguazú con el objetivo de reivindicar la gestión del ex obispo Joaquín Piña a cargo de la Diócesis de Puerto Iguazú.
Uno hora antes de que los manifestantes se apostaran frente al edificio del obispado, una delegación de este grupo se entrevistó con Martorell. En la reunión cuestionaron el accionar del actual obispo y defendieron la gestión de Joaquín Piña.
Como respuesta a las aseveraciones de los manifestantes, el obispo de Iguazú, Marcelo Martorell, les aseguró que continuará trabajando «fuertemente» por la comunidad, a la vez que les pidió que se queden tranquilos ya que sostuvo que «siempre estaré con los que más necesiten, nunca los dejaré solos».
«Si tienen paciencia, me podrán conocer en plenitud. No se dejen llevar por los dichos de los demás», concluyó.
