A poco menos de un mes de haberse realizado el recambio de autoridades electas en el mes de octubre pasado, el ex intendente de 9 de julio podría enfrentar cargos en la justicia, si prospera una denuncia penal que le harían los sucesores de su mandato en aquella localidad.
Ni bien asumieron sus funciones los actuales administradores, encabezados por Maximiliano «Mansí» Duarte, habían revelado el vaciamiento de la Municipalidad, llegando a manifestar que «se habían llevado hasta las banderas».
Con el transcurrir de los días, un equipo de colaboradores del intendente, con el asesor legal Juan Carlos Selva Andrade, realizó una minuciosa investigación para determinar el verdadero estado financiero y patrimonial de la Municipalidad y poder cotejarlo con el que debía presentar Luis Cañete.
El pasado lunes, precisamente, se venció el plazo para que el ex alcalde presentara toda la documentación relacionada con los balances y el estado contable del municipio, pero Cañete no lo hizo.
A entender del asesor legal, cuando el Tribunal de Cuentas dice que hay «reparo sustancial», quiere decir que «Luís Cañete no puede justificar bajo ningún argumento donde fueron a parar esos fondos, no hay documentaciones que puedan demostrar».
