El Juez Correccional de Menores, Osvaldo Rubén Lunge, quien había procesado a un menor de 16 años sindicado como el autor material del incendio intencional que en abril pasado sufrieron en esta localidad cuatro vehículos particulares, confirmó que elevó la causa para que sea ventilado en juicio oral y público. La investigación está caratulada incendio intencional, la que contempla penas de entre tres y diez años de prisión, aunque en esta ocasión por tratarse de un menor, el trato judicial es diferente, aclaró el magistrado.
Inicialmente y tras un serie de medidas procesales ordenadas, dos meses después de ocurridos los hechos, el magistrado consideró que existía semi plena prueba de que el menor tuvo responsabilidades en el hecho, por lo que dictó su procesamiento. Y ahora, seis meses después de los incendios, la causa fue elevada a juicio, trámite que por disposiciones vigentes se realizará en Eldorado.
El menor procesado en la causa se encuentra a resguardo de sus padres, quienes son los garantes de las restricciones impuestas por el juez, como las salidas nocturnas entre otras.
A pesar de los múltiples comentarios que se generaron en torno a esta causa, fueron muy escasos los testigos aportaron datos concretos a la Justicia como para que se investigue, por ejemplo, a los amigos del menor, a varios de los cuales los rumores sindicaban como partícipes de los incendios.
Los hechos
En la madrugada del 26 de abril pasado cuatro vehículos fueron incendiados intencionalmente poco después de las cero, en una seguidilla de hechos ocurridos sobre la avenida Córdoba. En averiguación de los hechos fue demorado un menor, quien al momento de ser aprehendido, tenía en su poder un encendedor y dos envases de desodorante.
El raíd delictivo arrancó a las 0:30 aproximadamente, cuando en la vivienda de Ricardo Pfeifer, un jubilado domiciliado en la avenida Córdoba, entre Uruguay y Asunción, la llamas generadas intencionalmente según las pericias de los Bomberos y de los integrantes de la División Criminalística de la Unidad Regional IV de Policía, consumieron rápidamente el vehículo particular del sexagenario, un Renault 9.
Pfeifer se percató del hecho y con ayuda de su esposa y vecinos, logró combatir el incendio hasta que llegaron los bomberos. Pero las llamas le ocasionaron daños materiales casi totales al coche, como así a las paredes de su vivienda.
Un rato más tarde fue víctima de un hecho similar el empresario Gerardo Dalesio, quien reside sobre la misma avenida Córdoba, a una cuadra y media de la casa de Pfeifer. En esta ocasión el auto incendiado fue un Volkswagen Passat, que estaba estacionado en un patio descubierto contigo a la vivienda particular de Dalesio. El coche también quedó prácticamente reducido a cenizas.
Finalmente, otro móvil que sufrió daños materiales de consideración por un hecho de idénticas características que los dos anteriores fue la camioneta Chevrolet S 10 de un emprendedor metalúrgico, quien también reside sobre la avenida Córdoba y tenía su utilitario estacionado en el garage mientras él descansaba en su casa.
En tanto, sobre la misma arteria céntrica, un minibús Toyota también fue atacado de la misma manera, aunque como su dueño fue avisado por un ocasional transeúnte de que uno de los asientos del trasporte estaba incendiándose, pudo sofocar las llamas enseguida y los daños fueron menores.
(Puertoricoaldia)
