En operativos relacionados a la nocturnidad y el tránsito vehicular se concretó en el transcurso del fin de semana en Oberá y Campo Viera. Se practicaron en diferentes jurisdicciones, principalmente en los lugares de mayor concentración de personas. En horas de la noche y la madrugada como se viene haciendo, se efectuó el control de los locales bailables y comercios por el tema de la permanencia de menores, con la clausura de un bar en Campo Viera y un Club en Oberá. Mientras que en los habituales controles al tránsito se incautaron tres coches, por conductor ebrio, falta de documentación y picadas.
Se realizaron actas en dos lugares, donde se constató que, efectivamente, había menores de edad. En Campo Viera el sábado por la madrugada en un bar de la Avenida del Te, se estableció la presencia de dos menores de 15 y 17 años ingiriendo cerveza. En la Capital del Monte en la madrugada del domingo cerca de las 2, los policías detectaron a una niña de 16 y un jovencito de 17 en el Club Olimpia donde se desarrollaba un baile.
Se cerraron ambos locales dando intervención al Juzgado de Paz local. Por otro lado un joven de 20 años fue arrestado por conducir ebrio su vw gol. El procedimiento se dio en la zona urbana de la capital del te también en la madrugada del sábado.-Por picadas un muchacho de 19 años fue demorado junto a su auto, en la media noche del mismo sábado.
Efectivos del Comando detectaron que el conductor al mando de su Ford Taunus, practicaba «picadas» por la ruta 14 a la altura del Km. 12, con otro Renault Clío que se dio a la fuga.- Finalmente un tercer automóvil fue sacado de circulación en la esquina de las calles Corrientes y 9 de Julio.
La patrulla detectó cerca de las 2 de la madrugada del domingo un Toyota Célica que se desplazaba al mando de un joven. El chofer no tenía documentaciones del auto, además le faltaban luces y otras medidas de seguridad. En los controles con alcoholímetros participaron inspectores de transito municipal.
En distintos horarios otras 33 personas fueron detenidas por provocar disturbios en la vía pública, riñas o simplemente por encontrarse caminando por la calle en evidente estado de borrachera, siendo resguardados por seguridad tanto de estos como de los conductores que transitaban por las calles. Los más de 20 efectivos afectados al operativo debieron acudir en varias oportunidades a distintos puntos de la ciudad por diversas causas, con un denominador común: el alcohol. Varios de los involucrados nuevamente fueron menores de edad en estado de embriaguez.
En todos los casos fueron asistidos por el medico policial y extendidos los correspondientes certificados, fueron trasladados a los calabozos para contraventores, quedando detenidos por infringir el edicto policial el cual versa sobre «ebriedad».-
