El entrenador de fútbol detenido admitió «tocamiento» con «consentimiento» de los chicos abusados

El abogado Diego Julián Ojeda dijo que su cliente Luis Vargas negó que los chicos le hayan practicado el sexo oral y que en estos actos «participó otro menor de 16 ó 17 años a quien posiblemente los menores le hacían la fellatio». En la indagatoria judicial hoy, el entrenador de fútbol infantil detenido desde el jueves último reconoció «en parte los hechos», en referencia a las fotografías encontradas en el celular del supuesto abusador, donde revelan escenas sexuales explícitas con menores de entre 9 y 12 años. En la causa que se instruye en el juzgado de Instrucción Nº 3 de Eduardo Dorsaneo hay tres denuncias por el hecho realizadas por los padres, sumado a un hecho similar en el año 1995 y que podría ir a juicio oral. El abogado que también defendió a Vargas en el caso anterior dijo que su cliente admitió haber tomado las fotos de los hechos, y sindicó la participación de un menor de 15 años. El director técnico de fútbol reconoce que «sólo hubo tocamiento con consentimiento de las partes, no hubo amenaza ni presión ni coacción», aunque aclara que al ser menores no existe el consentimiento e igualmente puede ser imputado en el delito, como en los casos de estupro que involucra a las adolescentes.

Agregó también en declaraciones en Radio Libertad y LT 4 que hay denuncias de padres con imputación a otro menor que tuvo participación en los hechos.

Ojeda recalca que el entrenador de fútbol de 42 años niega que los chicos le hayan practicado el sexo oral y que en estos actos «participó otro menor de 16 ó 17 años a quien posiblemente los menores le hacían la fellatio».

Ojeda explicó que en las denuncias del año 1995, Vargas fue asistido por los médicos forenses y «ellos habrían determinado que era una persona normal, si mi cliente ha cambiado la conducta no puedo juzgar. La situación en aquella oportunidad era un delito que tenía la posibilidad de la excarcelación».

El abuso tiene posibilidades de una excarcelación. Por el momento en base a todos los hechos que hay y la connotación el juzgado tiene que seguir instruyendo más, «yo no estoy apurado hay que incorporar elementos a las causas, falta incorporar el examen médico para saber si se encuentran violados estos chicos y podría cambiar la figura».

El abogado consideró que si bien es grave, el tocamiento «es otra situación, es más suave en relación a si fuera violación».

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