El presidente de la Cámara, Horacio Blodek se defiende de las críticas de la oposición y asegura que sólo son quejas por el reparto de fondos. También asegura que el ahorro se usará para comprar equipamiento y en algún momento del año, recomponer el salario de los empleados, aunque analizando caso por caso.
«Vamos a transparentar todo el gasto de la Cámara». Con esa premisa arranca Horacio Blodek, el presidente de la Legislatura que conmocionó a los bloques opositores al ordenar suprimir los subbloques que se habían armado y recortar contratos que tenían los legisladores que se habían separado de sus bancadas oficiales. En realidad, no hizo más que aplicar criterios que ya se habían utilizado antes con otros presidentes del Parlamento, pero cuando lo decidió, sufrió un «piquete» en su oficina por parte de los diputados que perdieron jugosos contratos para repartir.
«La preocupación no era por los contratados, sino por el dinero», asegura Blodek, mientras diagrama en un pizarrón el esquema de los cuatro bloques que son reconocidos administrativa y políticamente. Es que cada bloque armado de la escisión de su partido, contaba con presidente y cargos para repartir. Cada presidente de bloque cobraba un adicional de tres mil pesos, el vice de dos mil y el secretario de bloque, otros tres mil pesos.
En cambio, ahora cada legislador se queda con los dos contratos de categoría ocho, que representan 900 pesos cada uno. Blodek señala que hubo diputados que tenían cuatro contratos en lugar de dos y que por eso la amarga queja de los opositores cuando se tomó la decisión de recortarlos.
«Pero no podemos seguir con esas prácticas. Por eso el pueblo de Misiones no cree en la Legislatura, porque se financia a contratos de unos pocos. Creen que la Cámara es el reducto de los acomodados y debemos terminar con eso», enfatiza el arquitecto, ex intendente de General Urquiza por dos períodos.
Blodek asegura que los contratos «que tenían que ser renovados, fueron renovados». Y niega que tenga cien contratados como dicen los diputados de la oposición. «Vine con mi equipo de cuatro o cinco personas», asegura. En cambio, señala que el ex presidente, Esteban Lozina, hoy con bloque político aparte, llegó a contar con 50 asesores.
¿Cuánto se ahorra en total con los contratos?
Entre 350 y 400 mil pesos por año. Se eliminaron 50 contratos que estaban en forma irregular, por 36 mil pesos mensuales.
Pese al ahorro en el gasto político, la Legislatura aumentó su presupuesto en seis millones de pesos. Blodek asegura que ese dinero se utilizará en realizar las reformas edilicias postergadas desde el año pasado y en comprar equipamiento informático, una promesa que hizo el hoy senador Luis Viana cuando presidía la Cámara, pero que a decir de los diputados del oficialismo, nunca se cumplió. Viana había dicho que dos millones de pesos del aumento presupuestario se utilizaron en la compra de computadoras nuevas para todos los diputados. Sin embargo, las máquinas no aparecieron.
«Vamos a mejorar el sistema tecnológico y en el transcurso del año vamos a discutir con los trabajadores la cuestión salarial. Pero se va a estudiar caso por caso. En algún momento, y ese es mi compromiso, vamos a resolver los atrasos salariales, pero analizando cada situación en particular», anticipa Blodek.
Los autos
Durante varios días del caluroso enero, Blodek fue cuestionado por la oposición por no recibirlos y por haber comprado vehículos nuevos para el uso de los diputados.
El legislador se defiende y aclara: «Yo no tengo la culpa que los presidentes anteriores no hayan priorizado el contacto con los misioneros ni recorrer el interior. Los legisladores tienen que estar en contacto con los misioneros de cada rincón, no solo en los despachos en Posadas. Hemos renovado vehículos obsoletos que eran de la década del 70 o del 80, con un alto costo de mantenimiento. Compramos seis autos cero kilómetro, de los cuales tres son camionetas pick up de cabina simple y dos de cabina doble», cuenta.
Las obras
Hace algunos días, los diputados de la oposición convocaron a la prensa para «mostrar como se obstruía» su trabajo al no poder acceder a las oficinas que estaban en refacción. Blodek ironiza sobre la gran cobertura mediática que tuvo el hecho de ver subido en una escalera de mano al radical Orlando Schuster. «No estoy haciendo nada más que avanzar con el decreto que firmó Esteban Lozina el año pasado para reformar la Legislatura que corría serios riesgos de caerse. Nada se hizo desde septiembre cuando se firmó el decreto. El 3 de enero decidí avanzar con las obras para evitar cualquier posible catástrofe y no es cierto que haya alguna empresa mia o de algún familiar involucrada en las refacciones. Es simple, le di a la comisión de Obras y Servicios Públicos de la Cámara que haga la obra a través del sistema de administración. O sea, es la Legislatura la que está haciendo las obras, no hay una empresa contratatada y son los diputados los que deciden los pagos y qué empresa es la que trabaja. Exijo que cada trabajador esté en regla para que nada pueda ser cuestionado», afirma.
Además, se refirió a la clausura municipal que ordenó el intendente de Posadas, Jorge Brignole. «Le mandé una carta documento para que cese con su actitud de inmiscuirse en este poder, porque no tiene potestad ni autorización para ingresar al Parlamento», contraataca.
En estos momentos, la obra avanza a buen ritmo y se espera que para finales de febrero esté completada. Lo que se está haciendo es cambiar las estructuras de madera por metal y refacciones menores en las oficinas. Mientras tanto, los diputados que se vieron afectados, pueden trabajar en el edificio anexo, a pocas cuadras de la Legislatura.
A trabajar a la calle
