Por la falta de inversión y dinero en el mantenimiento de aviones y de aeronafta, muchos aparatos dejaron de volar en el aeroclub Oberá. Debido a ello, se impulsa desde el mismo ente la construcción de dos ultralivianos. Oberá. Por la falta de inversión y dinero en el mantenimiento de aviones y de aeronafta, muchos aparatos dejaron de volar en el aeroclub Oberá. Debido a ello, se impulsa desde el mismo ente la construcción de dos ultralivianos.
Según Edgardo Stevenson, responsable del Aeroclub Oberá «se están construyendo dos ultralivianos, ahora se construye el fuselaje luego debe venir fuerza aérea para ver si esta bien hecho y luego seguir por las otras partes, en marzo tendremos mas determinaciones porque en este mes es cuando se reúnen todos los amantes y propietarios de ultralivianos en Buenos Aires y de alli se sacan muchas cosas que nos pueden servir para continuar con esta ilusión», explicó.
En lo referente al Club dijo que «si hubiera un poco de movimiento de aviones habria interes en cambiar la infraestructura, este es un aeródromo que fue hecho por la provincia sobre terrenos provinciales, lo del Club son solo 500 metros y la sede, el resto es todo provincial, pero no hay movimiento entonces tampoco hay inversión».
En cuanto a máquinas que están pero sin volar señaló que «hoy no se puede reparar una maquina los repuestos son imposibles de acceder, en otro momento con subvenciones del estado se podía pero ahora ya no, lo que hace que nuestros aviones no estén en condiciones de volar, solo se puede utilizar ultralivianos».
Sin embargo, a pesar de la realidad que golpea duro, los ultralivianos son resistidos por los pilotos «pero la aero nafta esta 4,50 pesos lo que hace también imposible seguir, sumado a que escasea porque Obera no tiene surtidor de aeronafta», dijo Stevenson.
Mientras tanto, la ilusión de contar con ultralivianos propios y que construyen vecinos y el propio Stevenson hace que se pueda pensar en una continuación de esta actividad, la aérea, que años atrás se destacaba en la provincia.
