Unos 200 presos alojados de la Alcaidía ubicada en el barrio San Antonio de la capital formoseña, se amotinaron ayer por la tarde y comenzaron a quemar colchones y frazadas.
El jefe de la policía provincial, comisario Crisanto Ortiz, y el juez local Héctor Shur, se trasladaron al lugar para convencer a los amotinados que detengan la protesta.
Personal policial y de Gendarmería Nacional realizaron un operativo cerrojo en la zona con la participación de varias dotaciones de bomberos.
La protesta se desató ayer por la tarde en la Alcaidía Policial de Varones, cerca de las 14. Algunos vecinos aseguraron haber escuchado disparos en el penal.
Se desconoce el motivo de la medida, pero un medio local aseguró que al menos dos ambulancias salieron del lugar con las sirenas encendidas.
Al cierre de esta edición continuaban las negociaciones para disuadir a los presos y evitar algún tipo de accidentes.
La policía y los bomberos rodearon el lugar.
