Afirman que se redujo el nivel de infectación de la hormiga minera

Es por el trabajo que comenzó en 2005 con el Programa de Control de la Hormiga Cortadora, del Ministerio del Agro. El productor accede al veneno a mitad del valor que tiene en el mercado. [su_note note_color=»#cdcdcd»]"Hasta el momento hemos entregado más de 80 toneladas”, indicó Semeguen [/su_note]Por los resultados de la campaña de control de la hormiga minera que se inició el año pasado ahora mermó la demanda del mirex», aseguró José Semeguen, Coordinador del Programa de Control de la Hormiga cortadora que lleva adelante el Ministerio del Agro y la Producción.
En el pasado mes tuvo un pequeño repunte la demanda del hormiguicida, que aseguran se debe a una cuestión estacional, ya que los insectos se encuentran en su etapa de reproducción y creación de nuevos nidos. «Aún así es menor la demanda», afirmó el funcionario.
En los últimos tiempos el ataque de las hormigas minera y cortadora había generado preocupación entre los productores, dirigentes e intendentes de todos los municipios de la provincia.
Los cultivos más afectados suelen ser los anuales y las plantaciones jóvenes forestales, sobre todo el pino. En una noche el productor perdía lo que costó meses de trabajo.
La cartera agraria comenzó a trabajar en este flagelo de las chacras misioneras en mayo de 2005 con los intendentes municipales como nexos para que el veneno llegue a los colonos. Para ello se creó un fondo rotatorio que es administrado por el Ministerio del Agro quien se encarga de comprar en volumen y vender a precio de costo el hormiguicida.
El programa vende a 5,70 pesos el kilo del producto, mientras que el precio promedio del mercado es de 10 pesos. «Hasta el momento hemos entregado más de 80 toneladas, de los cuales tenemos unas 10 en stock», indicó Semeguen, quien también ocupa la titularidad de la Dirección de Yerba Mate y Té.
El programa funciona mediante acuerdo entre la cartera agraria y los municipios que le permite a los intendentes retirar el veneno para vendérselos a los productores. El dinero recaudado lo tiene que depositar en una cuenta bancaria del programa. «Por último tiene que rendir y traer la planilla de los productores beneficiados» agregó en declaraciones efectuadas a LT 17.
Uno de los enemigos que tienen los productores adheridos al programa, además de las propias hormigas, lo constituyen las chacras que están abandonadas o aquellos dueños que no realizan el control de la plaga, porque causan serios inconvenientes a los que sí realizan las tareas en tiempo y forma. El colono no pierde su productividad o plantaciones, pero debe disponer de mayores recursos para afrontar la situación.
Desde el programa de control también se realiza un trabajo conjunto con el Programa Pequeño Silvicultor del Ministerio de Ecología, Recursos Naturales Renovables y Turismo, puesto que en la etapa previa y durante la implantación de los plantines forestales es fundamental impedir la presencia del insecto.

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