Salud Pública acerca a los barrios el programa «Elegí la vida», iniciativa gratuita e indolora preventiva.
Necesarios. Los controles ginecológicos son impostergables y reveladores.
¿Qué es la prueba Papanicolau? ¿A qué edad es oportuno hacerlo y con qué frecuencia? ¿Dónde puedo consultar? Son algunas de las dudas más frecuentes con las que suelen toparse a lo largo de su vida las mujeres actuales. Para disipar ese tipo de preguntas el Ministerio de Salud Pública de la Provincia acerca a los barrios posadeños el examen ginecológico mediante el Programa «Elegí la Vida», iniciativa mediante la cual 1.000 mujeres ya se hicieron este estudio.
El Programa -ejecutado a través de la Subsecretaría de Atención Primaria y Salud Ambiental- brinda en una primera instancia talleres informativos sobre la importancia que tiene para la salud femenina el examen del PAP, para luego actuar de nexo entre las mujeres y el Centro Asistencial donde podrán realizarse el estudio de forma gratuita.
Los encuentros son coordinados por la directora de Atención Primaria, Rosa del Carmen Piragine, y son espacios donde se promueven el autocuidado de las mujeres para disminuir el número de infecciones vaginales y de mortalidad por cáncer de cuello uterino. Al mismo tiempo, son una oportunidad para fortalecer las acciones del Programa de Salud Sexual y Procreación Responsable.
«Elegí la Vida» dio sus primeros pasos en el 2005, y desde ese tiempo a esta parte ya registró un total de 1.000 exámenes en distintos barrios de Posadas y en el correccional de mujeres. Se trata de una prueba simple, gratuita y sin dolor, que se deben hacer todas las mujeres para detectar en forma temprana si existen alteraciones en el cuello de su útero y así poder prevenir un cáncer.
La primera visita ginecológica es conveniente en la adolescencia (14 ó 15 años) para que se planteen dudas y se empiece a conocer sobre los métodos anticonceptivos y enfermedades reproductivas. Con esta visita se pueden evitar embarazos adolescentes y no deseados.
Una vez que la mujer inició su vida sexual o a partir de los 20 años, debe asistir una vez al año (en caso de presentar un cuadro normal) para empezar con los controles ginecológicos. A partir de los 40 las mujeres, además del control ginecológico, mamario y el papanicolau, deben sumar un nuevo estudio: la mamografía.
