Es una de las medidas que se propuso para evitar una crisis en el negocio yerbatero durante la reunión de ayer entre los representantes del sector realizado en Jardín América. También cargaron contra la «bancarización» y solicitan reducir la carga impositiva. Advirtieron sobre una caída del consumo interno y en las exportaciones.
Debates. Los principales referentes del sector se reunieron en Jardín América.
Los máximos referentes del negocio yerbatero se reunieron ayer en Jardín América y elaboraron un documento donde plantearon una serie de medidas para evitar que se genere una situación de crisis.
El principal punto que se plasmó en el documento que se elaboró al finalizar la reunión refiere a la posibilidad que Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), en forma conjunta con la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (Sagpya), instrumente medidas para regular la oferta como cupificación o, lo que sería una medida extrema, la suspensión temporaria de plantaciones.
La puesta en marcha de un mercado concentrador o un centro de transacción de yerba mate fue otra de las propuestas plasmadas en el documento.
Durante la reunión los asambleístas se mostraron reacios a la aplicación de la Ley de Transparencia de la Producción Originaria de Misiones -más conocida como Ley de Bancarización- y exigieron su derogación.
El encuentro se desarrolló en el Club Alemán de la mencionada localidad y contó con la presencia de 200 dirigentes y representantes de los distintos eslabones que componen la actividad yerbatera. Todos coincidieron en que la Ley de Bancarización, particularmente en el capítulo yerba mate, no genera beneficios para el sector. «Fue una reunión muy productiva por la concurrencia de todos los sectores. Se opinó sobre el tema de la bancarización, que fue dictada en forma inconsulta y que así como está es molesta, genera un costo mayor y no sirve para el control de precios», señaló Sergio Delapierre, presidente de la Asociación Rural Yerbatera Argentina (ARYA), entidad que motorizó la reunión.
En el transcurso de la asamblea los dirigentes del sector industrial alertaron sobre una caída en el consumo, tanto en el mercado doméstico como en las exportaciones, que al cierre de este año sumarían alrededor de 12 a 13 millones de kilos de yerba mate elaborada.
«Si a esto añadimos que el sector está con precios controlados, sin trasladar el aumento de la canchada, se genera un cuadro en el cual la actividad se encuentra sin recursos para encarar acciones y revertir la situación de la yerba mate», remarcó Miguel Sniechowski, presidente de la Cámara de Molineros de Yerba Mate de la Zona Productora (CMYMZP). También recordó que desde diciembre pasado -cuando el kilo de canchada se fijó en $ 1,51- el sector mantiene la cotización de la yerba a salida de molino. Desde ese momento la canchada tuvo dos incrementos: a $ 1,60 en mayo a $1,85 en octubre.
Cargas impositivas
Una de las salidas que proponen los yerbateros está relacionada a la reducción de las cargas impositivas. Consideran que la modificación de algunos gravámenes podría alentar a los diversos eslabones (producción, secanza y molienda), además de posicionar mejor a la infusión frente a la aparición de nuevos competidores (aguas saborizadas, gaseosas) que se suman al té y al café.
En el acta los asambleístas propusieron al Gobierno Provincial que reduzca al 0% la alícuota de Ingresos Brutos para el sector primario que comprende producción y secanza. Además, plantearon que se debería instrumentar una gradual reducción de la tasa de Ingresos Brutos al sector de la industria, que actualmente se ubica en el 2,5%. También pidieron que se elimine el Impuesto a los Ingresos Brutos que grava con un 2,5% a las exportaciones de yerba mate. «Mientras que en los países desarrollados eximen de impuestos y subsidian a sus productos para que se puedan exportar, nosotros hacemos todo lo contrario y gravamos las exportaciones», subrayó Gerardo Vallejos, presidente de la Federación de Cooperativas Agrícolas Limitada de Misiones (Fedecop).
En cuando a la bancarización, el cooperativista marcó diferencias y se mostró partidario de mejorar la ley vigente. «Todas las empresas están bancarizadas. En particular no estamos (la Fedecoop) en contra de la ley, lo que hay que corregir es la reglamentación, porque como está hoy, no nos sirve absolutamente».
Como hacía mucho tiempo que no se observaba, la «familia yerbatera» comenzó a dar señales de unidad, en busca de una salida conjunta para un panorama al que considera preocupante. «Se vislumbra un año difícil para la zafra 2.007 si no encontramos soluciones inmediatas», advirtió Sniechowski.
Por parte del Ministerio del Agro y la Producción estuvo presente el Subsecretario de Industria y Economía, Sergio Ferreyra, mientras que por el Legislativo asistió el diputado provincial José Meier. Los yerbateros acordaron volver a reunirse en asamblea el próximo martes, en el mismo lugar y a partir de las 9 horas.
