La mayoría de las familias subsiste con la venta de los productos que obtienen de la chacra. Pero reclaman la elaboración de un pozo de agua que les asegure la provisión del vital líquido. Es costo es elevado
Verduras. En Galitziana piden soluciones al problema de la falta de agua.
Si hay agua, no falta nada». La frase es de los colonos de Galitziana, en Olegario Víctor Andrade. El problema del agua en la picada es acuciante. Lo que no sucede en las chacras vecinas, en Bañado Grande, es grave en la Galitziana, donde no hay arroyos con suficiente caudal para represarlo y colocar un ariete. La única salida para algunos es acarrear el líquido vital desde el arroyo Mártires con un tanque cisterna y depositarla en sus chacras, pero son pocos los que alcanzan a tener tractor y condiciones de almacenamiento.
En la Picada Galitziana de Olegario Víctor Andrade, a 60 kilómetros de Posadas, además de la angustia por no contar con agua suficiente para la casa, la escasez impide el riego de las huertas, «cuando mejor se venderían las verduras», dice Malvina Caneppele. «No hay cosa más triste que no tener agua».
«En el verano no podés hacer nada de lo que es verde, de verdura. Acá se terminó toda la cebolla, orégano, no quedó nada con la seca», contó Malvina. «Con los tanques de chapa se acarrea, pero se funden todos, porque son de chapa y golpean», añadió.
Los colonos conocen una posible solución: un pozo perforado. Pero, el trabajo cuesta unos 70 pesos por cada metro de profundidad y en el cerro debería irse hasta los 100 a 150 metros.
La falta de agua es una preocupación. Pero la vida de los campesinos no se detiene y encuentran en la Feria Franca de Leandro N Alem una salida económica. Algunas familias se dirigen a Bonpland y a Posadas. «Es un lujo», cuenta Malvina. También venden a los comedores comunitarios, a través de un convenio.
