Será de cien millones de pesos con aportes del banco Macro y el Estado subsidiará las tasas para que no superen el seis por ciento anual. Incluso pueden ser negativas si el proyecto genera mano de obra intensiva. El programa fue presentado en la reunión regional de adeba que se realizó ayer en puerto iguazú.
El gobernador Carlos Rovira aprovechó la presencia de las principales entidades bancarias del país y de unos 150 empresarios de la provincia para anunciar formalmente el lanzamiento del Fondo Fiduciario para financiar actividades productivas. El fondo contará con cien millones de pesos iniciales aportados por la Provincia y el Banco Macro-Bansud que prestarán el dinero a tasas de entre cinco y seis por ciento anual, la tasa financiera más baja del mercado, e incluso, a tasas negativas si el emprendimiento generara mano de obra intensiva.
Rovira cerró la VII reunión regional de la Asociación de Bancos de Capitales Privados (ADEBA) que presidió el titular del Macro-Bansud, Jorge Brito, con la presencia de los principales bancos del país y más de un centenar de firmas misioneras de primera línea.
Rovira agradeció el aporte privado y resaltó que el sector financiero debe acompañar el repunte de la economía con crédito barato para que no se detenga el crecimiento después de la crisis de comienzos del siglo.
El Fondo Fiduciario contará con aporte estatal y privado y servirá para financiar actividades productivas. Será cíclico y aumentará con la devolución de los créditos como los programas Provalor ya en vigencia, que serán potenciados con este fondo y el aporte que pueden realizar otras entidades a partir de la puesta en marcha del fondo.
El Estado subsidiará parte de la tasa a los bancos para que la producción misionera acceda a lo que será el crédito más barato del país con un promedio de cinco o seis por ciento anual. Además, contará con un plazo de gracia amplio para que los fondos se pongan en marcha y si el proyecto es viable, la tasa puede llegar a ser negativa, es decir que el costo será solo la devolución del capital.
El banco será el encargado de analizar la viabilidad de los créditos y del cobro de los préstamos con lo que se garantizará el recupero que alimentará nuevamente al fondo.
«Junto al Macro oficializamos esta herramienta de crédito con el fideicomiso con el capital privado sumado a la política fiscal que devuelve lo que recauda entre los que más ganan para volcarlo en el valor agregado de la producción», aseguró Rovira en su disertación al cierre del encuentro de banqueros y empresarios.
Rovira ratificó ante los empresarios la política fiscal que le permite al Estado contar con recursos genuinos. «Misiones le genera al país 5.500 millones de dólares al año y recibe por coparticipación el 3.23 por ciento, por lo tanto buscamos los recursos», indicó.
Coincidentemente, el Estado y el sector privado presentes en la reunión de ADEBA que sesionó en el Iguazú Grand Hotel Resort & Casino, apuntaron a que la economía seguirá en crecimiento sólo con acceso al crédito.
En ese sentido, Brito resaltó que la banca privada aumentó el año pasado el 35 por ciento el crédito y este año esperan alcanzar los 40 por ciento.
El gobernador destacó que Misiones hace punta en el modelo de apoyo a la producción con los planes Provalor que se imitó en la Nación. Además, pronosticó que la economía misionera volverá a crecer este año a un promedio por encima del 14 por ciento, que alcanzó el año pasado, muy por arriba del nivel nacional.
También Carlos Melconian, el economista invitado por ADEBA para la disertación, sostuvo que aumentó la rentabilidad de los bancos lo que permitió la reactivación de los créditos.
Un proyecto largamente preparado
El fideicomiso para la producción fue un compromiso de Rovira el año pasado en plena campaña electoral. Pero hasta ahora no se había puesto en marcha por la negativa de la Cámara de Diputados, por entonces manejada por la oposición, que rechazó la figura del fideicomiso.
En diciembre, cuando la Cámara cambió de mando, se derogó la ley que impedía la creación del fondo y así se pudo poner en marcha.
Ahora sólo resta la instrumentación de los acuerdos para que los créditos lleguen definitivamente a manos de los productores en una herramienta más.
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