Un nuevo trabajo científico que tiene como escenario los Esteros del Iberá fue presentado a la opinión pública. En esta oportunidad el objeto de estudio es la fauna íctica del humedal. Los investigadores coincidieron en señalar la necesariedad de un estudio de estas características, debido a la escasez de conocimientos sobre la biología de estas especies. La investigación, compendiada en el libro Peces del Iberá «Hábitat y diversidad», fue realizada por un equipo de científicos encabezado por Jorge Casciotta y Adriana Almirón de la Universidad Nacional de La Plata y José Bechara de la Facultad de Medicina de la UNNE.
En las páginas de este dossier están volcadas las observaciones realizadas en campo por el equipo, que permitieron la identificación de 111 especies de peces, muchas de ellas difíciles de observar. Para la doctora Almirón la cantidad estudiada es «importante» si se tiene en cuenta que son 400 las especies de peces conocidas en el área continental de la Argentina.
Los investigadores coincidieron en señalar que un estudio sobre peces del Iberá era necesario debido a que son escasos los conocimientos sobre la biología de las especies del hábitat. «Es sumamente valioso contar con datos como parámetros, más aún si son los primeros, ya que estamos en presencia de un ambiente muy poco alterado por el hombre. Hay que tener presente que estas condiciones están cambiando en los últimos años por una mayor afluencia del turismo.
Esto provocará cambios que sólo se podrán analizar y comparar en función al trabajo que estamos presentando «, expresó el doctor Bechara. La investigación tiene la descripción y característica ecológica de los ambientes estudiados. Para esto se dividieron los 13.000 kilómetros cuadrados de los Esteros del Iberá en 7 unidades representativas y 68 localidades diferentes, algunas de las más representativas son el Estero Ipucú; laguna Fernández; arroyo Carambola y el río Corrientes.
Los científicos lograron elaborar una clave de identificación (con fotos e ilustraciones) de las especies, además de una detallada descripción de la morfología, biología, alimentación reproducción y hábitat de cada una de ellas. Particularmente la información relacionada con el régimen alimenticio es de lo más valioso del trabajo, ya que no existían datos precisos al respecto. El estudio de esta variable estuvo a cargo de Federico Ruiz Díaz, quien logró clasificar a los distintos géneros de la fauna íctica del Iberá en base a sus hábitos alimenticios.
Tanto Bechara, como Casciotta y Almirón fueron terminantes al señalar «hay más de 111 especies de peces en el Iberá», de hecho a pocos días de cerrado el trabajo lograron identificar otras 5.
Coincidieron en que determinar un número estimativo es «bastante complicado» por las características propias del lugar, pero a pesar de eso estiman que la mayor cantidad de ellas se las ubicaría en el corredor fluvial conformado por el río Corrientes y el arroyo Carambola. Para los científicos el libro no es la conclusión de la investigación. De hecho ya hay un proyecto en marcha para los próximos 3 años. En esta nueva etapa, los objetivos pasan por estudiar la forma en que las distintas especies transfieren los alimentos y conocer más sobre el hábitat del dorado.
El libro Peces del Iberá «Hábitat y diversidad» está dirigido para un rango amplio de lectores, que van desde especialistas (ictiólogos y ecólogos); funcionarios públicos que tienen a su cargo el manejo de ambientes acuáticos hasta personas con poco conocimiento del área. Como lo señalara el doctor Osiris Jantus, docente Derecho Agrario, Minero, de la Energía y Ambiental de la Facultad de Derecho de la UNNE, la obra bien puede clasificarse como de excelencia porque «en sus páginas está reflejado el amor por la ciencia y la pasión universitaria de sus autores».
(Por Juan Monzón Gramajo, Momarandu)
