Piñero denunció que es víctima de una campaña de desprestigio

«Es por haber revelado que un diario cobró 350 mil dólares del Estado en forma irregular», dijo. Asegura que tratan de impedir que llegue al STJ, y que fue sobreseído en una causa que ahora quieren reflotar.

Respuestas. Piñero asegura que enfrenta una campaña de desprestigio para limar sus posibilidades de llegar a la Corte.

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El Procurador General de la Provincia, Miguel Ángel Piñero denunció que es víctima de una campaña mediática digitada por el ex fiscal de Estado, Álvaro Caamaño, en su condición de presidente de la sociedad anónima El Territorio -diario decano de Misiones- y atribuyó la misma a que durante el proceso que terminó con la destitución del fiscal de Estado, Lloyd Jorge Wickström, «se reveló que ese diario «cobró 350 mil dólares» con una facturación irregular» que está siendo investigada por una fiscal.
Hace poco más de quince días, Piñero fue el encargado de la acusación que determinó la destitución de Wickström, «proceso en el que se revelaron irregularidades no sólo en el manejo de la Fiscalía, sino en contratos de publicidad de Multimedios con el diario El Territorio, cuyo director es Alvaro Caamaño», ex fiscal de Estado.Según Piñeiro, el decano de la prensa misionera «cobró 350 mil dólares en publicidad presentando facturas con fecha de emisión anterior a la impresión de las mismas, y en un expediente cuya firma autorizante fue falsificada, según denunció durante el juicio a Wickström la directora de Asuntos Jurídicos de ese ente, Cristina Leiva».
Según reveló ayer en comunicación con este diario, cuando culminó el juicio, Piñero en su condición de jefe de los fiscales de la Provincia, ordenó a la fiscal Margarita Wenner que inicie «una profunda investigación para determinar los responsables de la facturación trucha y quién cobró el dinero».
Desde ahí, se inició lo que consideró una «campaña de desprestigio» en su contra, ante la eventualidad de que sea postulado como integrante del Superior Tribunal de Justicia.
El diario El Territorio publicó sendos informes sobre la politización del Poder Judicial en los que apuntó especialmente a desempolvar supuestos antecedentes penales del Procurador. En su edición de ayer, se publicó un informe sobre su detención y supuesta vinculación con una estafa de miles de dólares en 1976, un mes después de iniciada la dictadura militar. Como pruebas, remiten sus propias notas e informes de la agencia estatal Télam y concluyen que nunca fue del todo aclarada la participación de Piñero en el hecho. Además lo vinculan como «abogado» de una gavilla de ladrones y recuerdan que fue apoderado del partido Tercera Posición.
Según Piñero, el diario no contó el final de la historia. Relató que efectivamente fue «abogado de un empresario denunciado por estafa y detenido por la Policía Federal en un confuso episodio en el que aparentemente el objetivo de los uniformados era quedarse con el dinero». La causa fue desdoblada y prescribió por inacción la que tenía a Piñero acusado de resistencia a la autoridad. «Pero la otra, referida exclusivamente a la estafa, terminó con mi absolución en 1984, dictada por el juez Arturo Fabián Ramallo Cambas».
«El diario no cuenta el final de la historia», acusa Piñero. «Unen las dos causas y dicen que prescribió para echar un manto de dudas sobre mi persona», cuestiona.
«Lo publicado por este medio es de una malicia que no tiene cabida en una mente que esté en sus sanos cabales. Éste es el precio que debo pagar por mi correcto desempeño en la función que ejerzo. Lo publicado no se ajusta a la verdad. Además de tener a mi familia y a un montón de personas que me acompañan, creo profundamente en Dios y de la misma manera me fortalece saber que hayan tenido que recurrir a una historia de 30 años atrás para ensuciar mi nombre contándola a la manera del ilustre escriba, autor de semejante publicación».
«Fui prácticamente secuestrado por la Federal en plena dictadura. Y si El Territorio cree que durante el Proceso estaban dadas todas las garantías individuales y legales del debido proceso y la defensa en juicio, que se lo digan a los familiares de desaparecidos», recuerda en un diálogo con Misiones On Line.
«Mi intervención fue juzgada por la Justicia con sentencia absolutoria firme, porque el fiscal no apeló. En 1990 la Legislatura analizó mis pliegos como vocal de Cámara y no hubo objeciones, porque no tengo antecedentes penales. En 16 años como Procurador no fui cuestionado», asegura Piñero.
El Procurador sostiene que «la campaña» apunta esencialmente a evitar que sea postulado como ministro del Superior Tribunal de Justicia, aunque aclara que hasta ahora «nadie me ofreció nada».

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