El ingenio mejoró el precio del 2.004 y pagará 42 pesos por tonelada. La producción rondará los 3,5 millones de kilos.
Codiciada. La caña de azúcar también tiene mucha demanda en el sector ganadero, para alimentación de los animales
Como todas las temporadas en esta época del año, el ingenio de San Javier volverá a cobrar vida a partir del inicio de la zafra azucarera, que se concretará el próximo viernes.
La puesta en marcha de los motores en la fábrica, que contará con la presencia del Gobernador de la Provincia, generará una intensa actividad en toda la cuenca cañera que involucra a nueve municipios y unos 800 agricultores.
Este año los cañeros recibirán 42 pesos por tonelada de caña orgánica, lo que significa una mejora de cuatro pesos respecto del valor pagado en la campaña anterior. Por la caña convencional se pagarán 34 pesos por tonelada.
Tal como se había anticipado, la sequía de los meses anteriores jugó una mala pasada y tiró abajo las expectativas iniciales de lograr un record de producción. Con los nuevos cañaverales se esperaba llegar a los 7 millones de kilos de azúcar elaborada, pero los cálculos en base a la caña que existe en las chacras hacen prever una producción que rondará los 3,5 millones de kilos.
De todos modos la cantidad de azúcar será superior a la del 2.004, cuando se elaboraron poco más de 2,5 millones de kilos.
Cuenca cañera
Si bien la producción de azúcar está muy lejos de las principales actividades productivas de la provincia, genera un movimiento socio económico importante en la región cañera. El ingenio emplea a 150 obreros y genera trabajo para fleteros y transportistas que suman mil familias. La zona productora comprende a los municipios de Mojón Grande, Itacaruaré, Dos Arroyos. Arroyo del Medio, Florentino Ameghino, San Javier, Concepción de la Sierra, Gobernador López y Santa María.
El año pasado la producción total de azúcar convencional se vendió a una firma mayorista del mercado local. La orgánica, en tanto, se colocó en una cadena de supermercados de Posadas, como también en el mercado nacional.
El cultivo de la caña de azúcar se remonta al siglo XIX. En el año 1950, se instaló en la localidad de San Javier el ingenio azucarero que funcionó bajo la figura de cooperativa hasta fines de la década del ’90.
En 1.996 se produjo la quiebra, lo que provocó el cierre del establecimiento arrastrando a familias de los municipios productores. El Estado Provincial expropió el ingenio, disponiendo su reactivación con gerenciamiento y administración a cargo del Instituto de Fomento Agropecuario e Industrial (IFAI).
De este proyecto de diversificación productiva participan alrededor de 800 colonos quienes cultivan 1.200 hectáreas de caña de azúcar.
Uno de los datos más interesantes es que el cultivo se asienta sobre un región de 23 mil hectáreas certificadas como orgánicas; es decir libres de agroquímicos. Esta es una de las principales ventajas de la actividad azucarera en Misiones, ya que el mercado internacional -sobre todo la Unión Europea- le otorga un valor agregado las prácticas agrícolas conservacionistas.
Aunque este año la seca complicó el panorama, desde el IFAI consideran que las 700 hectáreas de nuevas plantaciones permitirán cubrir parte de la capacida ociosa del ingenio, que el año pasado trabajó al 40%.
