Los administrativos del CGE desistieron del paro con asistencia a los lugares de trabajo por tres días. Reclaman un aumento del 30 % en sus habares. Después de trece días de protesta los empleados y autoridades del Consejo General de Educación (CGE) llegaron a una tregua. Consiste en la desistencia de la medida de fuerza implementada por los administrativos entretanto el CGE arbitra los medios para dar una solución de fondo.
Unos 300 trabajadores de la educación nucleados en la Asociación de trabajadores del Estado (ATE) se plegaron al paro con asistencia a los lugares de trabajo en reclamo de un aumento del 30 % en sus haberes, que le fuera garantizado por el titular del organismo Miguel Molina. En tanto, ayer en asamblea y tras dialogar con las autoridades decidieron levantar la huelga por tres días, mañana, el lunes y el martes.
Fuentes del gremio aseguraron que «mañana (por hoy) habrá una movilización nacional solicitando la devolución del 13%, recomposición salarial, distribución equitativa de los bienes y nosotros nos adherimos; por eso levantamos el paro a partir del viernes».
Teniendo en cuenta que los administrativos atienden a los 17 mil docentes perciben por decreto 899 un 60 % más en su salario. No obstante, por iniciativa del CGE se dispuso de un incremento al 90 % que comenzaría a regir desde mayo. Hasta ahora la resolución no tomó curso y los trabajadores se unieron en una manifestación diaria a partir del 27 de mayo.
«Somos cerca de 300 empleados y estamos hablando de un aumento de entre 70 y 120 pesos según la categoría», sostuvieron en el gremio. «Hay gente que tiene 20 años de antigüedad y cobra 500 pesos», dijeron.
Por su parte, desde el CGE señalaron que «se comprometieron a agilizar los mecanismos pertinentes para obtener el instrumento legal que permita atender los reclamos del sector en base al reordenamiento interno de los recursos genuinos».
Exigen un decreto
Los administrativos agrupados en ATE dijeron que de no estar firmado un decreto que respalde el incremento del 30 % de los haberes volverán a las medidas de fuerza.
Se reunirán en la planta baja del edificio del Consejo General de Educación -como lo venían haciendo- y no avanzarán con sus tareas diarias. También quieren tener fecha del depósito de lo adeudado en mayo y junio.
El consenso arribado entre administrativos y autoridades fue mediado por el secretario privado del Gobernador Carlos Rovira, José Luis Alzarría.
Y si bien desde el CGE se hizo saber que hay intenciones de regularizar la situación de los empleados, aún el presidente del ente autárquico, Miguel Molina, no ha emitido definición alguna dado que está fuera del país y regresa el 15 de este mes.
