Un cambio cultural en la higiene y en la seguridad en el trabajo

«Es notorio que se pide un cambio de mentalidad frente al enfoque del trabajo del hombre. Debemos buscar y prepararnos para una mentalidad en dirección hacia el control y dominio de la situación, a tomar precauciones y anticipar el imprevisto en lo cotidiano del ámbito laboral», explica el ing. Héctor Rodriguez Bruzza (*). Comencemos desde el principio, definiendo los conceptos básicos:

¿Qué es Higiene en el Trabajo?

Es el conjunto de normas y procedimientos tendientes a la protección de la integridad física y mental del trabajador, preservándolo de los riesgos de salud inherentes a las tareas del cargo y al ambiente físico donde se ejecutan.

Está relacionada con el diagnóstico y la prevención de enfermedades ocupacionales a partir del estudio y control de dos variables: el hombre y su ambiente de trabajo, es decir que posee un carácter eminentemente preventivo, ya que se dirige a la salud y a la comodidad del empleado, evitando que éste enferme o se ausente de manera provisional o definitiva del trabajo.

Conforma un conjunto de conocimientos y técnicas dedicadas a reconocer, que provienen, del trabajo y pueden causar enfermedades o deteriorar la salud.

¿Qué es Seguridad en el Trabajo?

Es el conjunto de medidas técnicas, educacionales, médicas y psicológicas empleados para prevenir accidentes, tendientes a eliminar las condiciones inseguras del ambiente y a instruir o convencer a las personas acerca de la necesidad de implementación de prácticas preventivas. Según el esquema de organización de la empresa, los servicios de seguridad tienen el objetivo de establecer normas y procedimientos, poniendo en práctica los recursos posibles para conseguir la prevención de accidentes y controlando los resultados obtenidos.

Es notorio que se pide un cambio de mentalidad frente al enfoque del trabajo del hombre. Debemos buscar y prepararnos para una mentalidad en dirección hacia el control y dominio de la situación, a tomar precauciones y anticipar el imprevisto en lo cotidiano del ámbito laboral.

Y en lo cotidiano surge la obligatoriedad de las normas legales que se deben cumplir para estar habilitado para la existencia de la Empresa y de la implementación de las leyes del caso de análisis: las legislaciones sobre la higiene, la salud y la seguridad en el trabajo. A saber: las Leyes 19.587. (Higiene y Seguridad en el Trabajo) y Ley 24.557 (Ley sobre Riesgos en el Trabajo) con sus Decretos modificatorios.

El gran desafío surge de intentar un cambio en acciones pequeñas ya que enfrente tenemos nada menos que una inmensidad cultural. Un simple cambio de hábitos, o sea, un cambio cultural, orientados por las normativas vigentes, partiendo de un análisis previo.

Es de destacar que las mismas normativas nos presentan un Formulario de AUTOEVALUACION, que les recomiendo el llenado de la misma ya que nos dará un panorama objetivo del estado de su Empresa frente al tema de Higiene y Seguridad en el Trabajo.

En dicho formulario se plantean preguntas respecto al estado de la Empresa en cuanto a las CONDICIONES DE SEGURIDAD.

De las herramientas: ¿ Están en estado de conservación apto para su destino?, ¿La empresa provee herramientas aptas para las tareas que se realizan?

Respecto a las maquinas, ¿tienen protección en sus elementos de transmisión, rotación y movimiento cuando los mismos puedan lesionar al trabajador? ¿Son alimentadas con energía eléctrica sistema de puesta a tierra? ¿Están sin puesta a tierra adecuadamente señalizadas? ¿Están identificadas conforme a normas IRAM todas las partes de máquinas y equipos que en accionamiento puedan causar daño a los trabajadores y no admitan protección física?

Y así sucesivamente, preguntas respecto al estado de los espacios de trabajo, de la protección contra incendios, del almacenaje de sustancias peligrosas, del riesgo eléctrico, aparatos sometidos a presión, del uso de elementos de protección y otros ítems, que de alguna manera nos dan un punto de partida el «evaluar» la situación actual de nuestra Empresa.

Un punto de partida autocrático esencial para iniciar una actitud frontal frente a la prevención de riesgos de accidentes laborales y siniestros de potencial riesgo.

Ya estamos en buen camino.


Autor(*):
Ingeniero Civil. Especialista en Higiene y Seguridad en el Trabajo.
Master en Gestión y Política Cultural en el MERCOSUR. [email protected]

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