La excarcelación de Omar Chabán inspiró a algunos abogados vinculados a la defensa de los procesados en la megaestafa a las cuentas judiciales. Asegurán que «No existe peligro real de fuga» y que «la constitución está por encima del código procesal». [su_note note_color=»#cdcdcd»]"Los de la megaestafa tendrían que estar todos libres hasta que sean juzgados", comentó sin sonrojarse el defensor oficial de Instrucción, Ricardo Venialgo.[/su_note][su_note note_color=»#cdcdcd»]Salvado de Sotelo no deja de ser una presa con privilegios internada en una clínica.[/su_note]Abogados allegados a la defensa de la ex jueza Graciela Salvado de Sotelo, preparan en silencio una nueva estrategia para que la ex titular del Civil y Comercial N° 1 salga en libertad. Los letrados basarán el pedido en la reciente excarcelación del empresario Omar Chabán, acusado de cometer 193 asesinatos ocurridos a raíz del incendio en el boliche República Cromagnon.
«En poco tiempo el caso Chabán va a llegar a la Corte, y al otro día Salvado de Sotelo tendría que estar en su casa esperando el juicio oral y público», explicó un abogado que pidió que se mantenga su nombre en reserva.
Entre los argumentos planteados para sostener el pedido de excarcelación de la ex magistrada, los letrados coincidieron en señalar que «no existe peligro real de fuga» y que «la constitución está por encima del código». Y bajo estos preceptos «no tiene por qué haber prisión preventiva».
Chabán está acusado de 193 homicidios, es decir que la eventual pena es mayor a ocho años y no puede ser de ejecución condicional. Pero los jueces Gustavo Bruzzone y María Garrigós de Rébori, de la Sala V de la Cámara del Crimen, le otorgaron la excarcelación al considerar que no se fugará.
«El rigor de la cárcel sólo debe ser el necesario para impedir la fuga o para que no se oculten las pruebas de los delitos, pero a esta altura de la instigación y no hay indicios de que se pretenda entorpecer. Además, nunca hubo indicios de que la doctora haya intentado evadir en algún momento la Justicia», esgrimieron quienes planifican la defensa.
«Nani», la excepción
Salvado de Sotelo, la ex jefa de despacho Nora Castelli, y los abogados Paula Espinosa, y Guillermo Abdón Fernández, se encuentran detenidos tras ser procesados como los organizadores de la asociación ilícita que se dedicaba a la extracción de fondos bajo la custodia judicial mediante órdenes de pago «truchas».
Todos ellos se podrían ver beneficiados en caso que un tribunal de alzada decida revocar la prisión preventiva. El único que no se vería alcanzado por una decisión de este tipo sería Cayetano «Nani» Castelli, debido a que estuvo prófugo de la justicia durante más de un año.
Semanas atrás, la jueza de la Corte Suprema de Justicia Carmen María Argibay alentó la idea de flexibilizar la prisión preventiva. «No deberíamos tener presos procesados», dijo.
En las cárceles del país hay unos 62.800 detenidos, el 62 por ciento de los cuales está procesado. Son unos 40.000 que podrían acogerse al mismo beneficio que Chabán, siempre y cuando no tengan otras condenas y que los jueces estimen que no van a fugarse, ni van entorpecer la investigación.
Otras opiniones
El abogado Eduardo Peredes, consultado por Misiones On Line, sólo se limitó a decir que «la ley establece que la restricción de la libertad es una excepción y que todo procesado, que goza del principio de inocencia, tiene derecho a permanecer libre hasta el juicio». Y el caso de Salvado «no es una excepción».
«Los de la megaestafa tendrían que estar todos libres hasta que sean juzgados», comentó sin sonrojarse el defensor oficial de Instrucción, Ricardo Venialgo. El letrado, que nada tiene que ver con el expediente, había sido consultado por este diario sobre la situación de los presos con prisión preventiva.
