A raíz de la denuncia, la justicia Federal de Posadas investiga una red de trata de blancas que estaría operando en Encarnación. Una fiscal de Córdoba Investiga una red de prostitución que se aprovecha de los débiles controles del puente Posadas – Encarnación. [su_note note_color=»#cdcdcd»]Según una investigación judicial, las chicas ingresan a través del puente Posadas – Encarnación.[/su_note]La fiscal Federal de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional de Posadas, Mirta Costa de Velasco, recibió una denuncia en la que una ciudadana paraguaya habría sido presuntamente obligada a prostituirse en la provincia de Córdoba.
En la denuncia la mujer, de 40 años de edad, dijo haber sido engañada por una persona que le ofreció trabajo en Córdoba y después fue obligada a prostituirse. Además aseguró que durante los cuatro meses que estuvo en una especie de prostíbulo, no se le pagó.
Según informaron fuentes judiciales la ciudadana paraguaya dio detalles del lugar en el que estuvo. Se cree, tras los dichos de la denunciante, que en el burdel habría otras menores de edad oriundas de Misiones y Paraguay.
Después que fue radicada la denuncia, las autoridades del Ministerio Público Fiscal tomaron contacto con sus pares de Córdoba para poder llevar adelante un trabajo de investigación en forma conjunta.
A raíz de la denuncia, ahora se cree de la existencia de una supuesta banda que se dedica a la trata de blancas y que la misma estaría operando en la vecina localidad paraguaya de Encarnación.
La denunciante, antes de abandonar el país por el puente Internacional San Roque González de Santa Cruz, decidió radicar la denuncia ante los funcionarios de la Dirección Nacional de Migraciones.
La investigación en Córdoba
La fiscal de instrucción de la ciudad de Córdoba, Eve Flores, se encuentra investigando una red de tráfico y prostitución de ciudadanas paraguayas, mayores y menores, que ingresaron por su propia voluntad o engañadas.
«Hemos detectado una red específica, Paraguay-Córdoba, y en lupanares de esa ciudad argentina se han identificado unas 20 mujeres en situación de riesgo y en forma irregular», señaló la fiscal cordobesa.
La semana pasada, la ministra de Desarrollo para Repatriados y Refugiados Connacionales de Paraguay, Nicacia Maldonado de Solaeche, se reunió con la fiscal Flores para trabajar en forma conjunta. Según la funcionaria, su trabajo consiste en hacer que el regreso de las jóvenes explotadas «no sea tan traumático, que no sean sometidas a una doble victimización».
Según la investigación de la fiscal Flores, la «cabeza» visible de una de las organizaciones mafiosas vinculadas a la red de tráfico de blancas, sería el policía cordobés Gabriel Eduardo Jalil, detenido desde el año pasado.
La investigación de la fiscal cordobesa, indica que las chicas que ingresan al país, a través del puente Internacional que une la ciudad de Posadas con Encarnación, lo hacen con documentos falsos, o auténticos pero con nombres de fantasía, o con identificaciones pertenecientes a otras personas.
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