La Federación de Productores Tabacaleros recordó que está en riesgo el sustento de un millón de personas que viven del cultivo. El tabaco mueve 4.670 millones de pesos anuales en todas las etapas.
Calidad.El tabaco de Misiones es reconocido en el mercado externo
La Federación de Productores de Tabacaleros de la República Argentina elevó ayer al Poder Ejecutivo y al Congreso Nacional un documento donde alerta sobre los efectos negativos que tendrá para el sector la ratificación del Convenio Marco Para el Control del Tabaco, impulsado por la Organización Mundial de la Salud.
«Si bien el convenio en cuestión declara la nocividad del humo del tabaco y mediante el mismo intenta restringir su consumo, con el fin de garantizar la salud pública mundial, lo que compartimos afecta y provoca perjuicios económicos y sociales irreparables en las regiones productoras de tabaco de nuestro país», señala el acta firmada por Cámara del Tabaco de Salta, la Unión de Tabacaleros del Tucumán, la Cámara del Tabaco de Corrientes, la Cámara del Tabaco de Jujuy y la Asociación de Plantadores de Tabaco de Misiones.
Viven del tabaco
De acuerdo a los datos que barajan los tabacaleros, en la Argentina alrededor de un millón de personas viven directa o indirectamente de lo que genera esta actividad. Remarcaron, además, que se trata de un cultivo intensivo y requiere de una gran cantidad de mano de obra, «por lo cual es un pilar fundamental en las economías regionales de las siete provincias tabacaleras».
Sin alternativas
Uno de los principales argumentos que esgrimen es que hasta el momento no se conoce una alternativa concreta para enfrentar una sustitución de las plantaciones, que es el objetivo final de la OMS. «Una de las conclusiones a las que arriban diferentes informes de Focal Point, organismo creado por el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas, es que a corto plazo, no existe ninguna posibilidad de sustitución o restricción al cultivo de tabaco sin que ello conlleve graves consecuencias económicas y sociales en las regiones y países productores», recordaron.
No ratificaron
En el mismo documento también se mostraron contarios a la sanción de un a ley que ya tiene dictamen en la Comisión de Salud de la Cámara Alta y que apunta a crear una Comisión que tendrá por objeto el Seguimiento y Control de la Implementación del Convenio Marco de la OMS.
«Con esta ley se está realizando una ratificación implícita del convenio al que no oponemos», explicaron.
«Teniendo en cuenta que los principales países productores a nivel mundial (China, Brasil, Estados Unidos y ZImbawe; entre otros) no han ratificado el convenio y que Argentina es uno de los mayores productores del mundo, es que solicita la no ratificación del Convenio Marco y el no tratamiento del proyecto de ley mencionado», enfatizaron
Los tabacaleros explicaron en reiteradas oportunidades que la mayor presión impositiva subirá el precio de los atado y que, al mismo tiempo, crecería el contrabando y la venta de cigarrillos «baratos». Esta evasión podría generar un caída del Fondo Especial del Tabaco.
En Misiones de los 100 millones de pesos del Presupuesto estimado por el Ministerio del Agro para este año, el grueso está representado por aportes del FET con 75 a 77 millones de pesos.
En Misiones la producción está en manos de unos 17 mil agricultores, que con sus familias conforman un universo cercano a las 80 mil personas directamente vinculadas el tabaco.
Argentina es el quinto país productor de tabaco del mundo. Desde la producción, proceso, industrialización, exportación y comercialización le representa a la Nación divisas por alrededor de 4.670 millones de pesos, de los cuales 190, 9 millones de dólares corresponden a exportación y 4.103 millones de pesos a ventas de cigarrillos en consumo interno y a producción 800 millones de pesos. Una reducción de estos montos de ingresos -advirtió la Federación- implicará necesariamente un impacto negativo en la recaudación nacional.
Una de las mayores preocupaciones de los tabacaleros -sobre todo de los plantadores – es que la aplicación de medidas restrictivas podrían alentar el contrabando, lo que a su vez podría generar una caída en la recaudación del FET.
Este fondo, conformado con un impuesto del 7% sobre el precio de cada atado, es el principal sostén para el precio del producto, además de facilitar el acceso a la obra social de los plantadores.
