El proyecto de ley lo presentó el diputado Pablo Hulet, preocupado por el
alto porcentaje de jóvenes que no pueden ingresar a la Universidad,
o acceden pero abandonan sus estudios, que son desaprobados o que se gradúan empleando un 60% más del tiempo previsto en los planes de estudio. La iniciativa espera ahora su tratamiento sobre tablas, para ser incorporado en el próximo calendario escolar.
En los fundamentos el diputado explica que no es discutible en este tiempo
la importancia de la educación, en todas sus áreas y niveles. Sobre todo si
sabemos que el tiempo de finalización de un período tan importante como el
Polimodal (la vieja escuela secundaria), abre un sin número de expectativas, tanto en el alumno, como en sus mayores. En este marco cabe preguntarse si la razón de tantos fracasos responde a la incertidumbre de no saber qué estudiar, dicho de otro modo, de la falta de orientación vocacional.
Hulet sostiene que indudablemente y como lo dice con claridad y contundencia el secretario de Políticas Universitarias, don Juan Carlos Pugliese, «el sistema educativo ya está fragmentado y desarticulado, ahora hay que buscarle soluciones». Pugliese ya comenzó a trabajar desde hace más de un año con las comisiones que conformó para articular la escuela media con la universidad y preparar a los estudiantes y docentes para ese paso. En la Provincia de Buenos Aires se introducirán cambios en el polimodal a fin de apuntalar las orientaciones técnicas.
En tal sentido el legislador renovador considera necesario resaltar la
importancia de la orientación vocacional como tarea social y pedagógica. La
palabra vocación proviene de «vox» que significa «acción y efecto de llamar»
y del sustantivo «vocatio» que significa «llamado». Este significado daría la sensación de que la vocación es algo innato, pero generalmente no se nace
con una vocación (salvo casos excepcionales), sino que ésta se va madurando con el tiempo.
Por otra parte, la orientación vocacional constituye una tarea social, porque consiste en ayudar al prójimo a elegir, aunque la decisión final sea siempre personal. También es una tarea pedagógica, porque se trata de orientar al estudiante y de informar sobre determinadas áreas de estudio. En sintesis la orientacion vocacional es un camino a recorrer y por lo tanto es un proceso: el de conocerse a si mismo y adecuarse a la realidad es ir desde quien soy a quien quiero llegar a ser.
Finalmente el diputado Pablo Hulet considera que estudiamos no sólo para
conseguir un trabajo sino para ser mejores personas, mejores ciudadanos e incertarnos mejor en la sociedad, en la familia. Enfatizó que si nuestros
alumnos son bien orientados en esta etapa de decisiones, seguramente los índices de fracasos y rechazos en la etapa universitaria descenderán
notablemente.
De ser aprobada la ley el Poder Ejecutivo Provincial instrumentará a través
del Consejo General de Educación las medidas tendientes a implementar la modalidad de aplicación de la norma de acuerdo a las características
escolares, sociales y geográficas de cada caso y tendrtá un plazo de 90 días
para su reglamentacion.
