El detenido por el crimen de Nozzi es Luis Raúl Menocchio

Tenía un documento a nombre de Juan Jara. Se operó para borrar sus huellas dactilares, pero igual lo identificaron.

El secretario y principal sospechoso del crimen del empresario televisivo Claudio Nozzi, cometido en Itatí, Corrientes, entre el 7 y 8 de este mes, es la misma persona buscada internacionalmente desde hace meses por los asesinatos de un empresario argentino y su novia en Paraguay en agosto último.

Se trata de Luis Raúl Menocchio, quien fue detenido el 11 de este mes bajo la falsa identidad de Hugo Jara, en el yate del empresario Nozzi, junto a su novia y un camarero, todos imputados en el asesinato.

El jefe de la Subprefectura de Itatí, Bruno Koplin, informó ayer a Télam que la verdadera identidad de Jara es Menocchio, tal como se determinó mediante el estudio de huellas dactiloscópicas realizadas en el marco de la pesquisa.

Quien oficiaba como secretario privado de Nozzi se había realizado en la ciudad de México una cirugía para borrar sus huellas dactilares, tal como las que suelen practicarse los integrantes de carteles del narcotráfico de ese país y de Colombia.

Pero, al parecer, el «borrado» de huellas, por el que, según las fuentes, pagó una cuantiosa suma de dinero, no fue lo suficientemente eficiente como para evitar su identificación.

Ayer, al enterarse de la verdadera identidad de Jara, las autoridades judiciales paraguayas manifestaron su intención de que el detenido sea extraditado para interrogarlo por los asesinatos del empresario argentino Eduardo Maciel y de su novia paraguaya, Graciela Méndez, asesinados a tiros y encondidos en tambores con cemento, en ese país, en agosto último.

El crimen de Nozzi y el del empresario y su novia, guardan para los pesquisas grandes similitudes: en todos los casos las víctimas fueron atacadas a tiros con un revólver calibre 22, tras ser esposadas con las manos en la espalda, desnudas y amordazadas.

En el caso del empresario televisivo, los balazos que le impactaron fueron cinco y su cuerpo fue arrojado al río Paraná con un ancla tridente para que se mantuviera sumergido.

Fuentes de la investigación dijeron que se determinó que días antes del crimen de Nozzi -que se presume fue cometido entre el 7 y 8 de marzo- Menocchio, bajo la identidad de Jara, compró en una ferretería de la capital correntina una cadena de siete metros, tres candados y un ancla tridente, similares a los hallados en el cuerpo del empresario.

Al ser detenido por el homicidio junto a su novia Silvia Graciela Heredia y un empleado del empresario, Luis Alberto Martínez, Menocchio declaró con el apellido Jara que, además de ser secretario de Nozzi, era su «íntimo» amigo y que sabía que éste se dedicaba a lavar dinero, aparentemente proveniente del narcotrráfico.

Según el acusado, Nozzi estaba por realizar una operación de lavado por 10 millones de dólares, aunque dijo desconocer si porvenían del narcotráfico o de un pariente del productor de cine y televisión que es político en Puerto Rico.

Menocchio explicó que el último contacto con Nozzi lo mantuvo cuando éste lo llamó por teléfono el lunes 7 desde el Novotel de Encarnación, Paraguay, donde le dijo que estaba alojado por unos días.

Los pesquisas llegaron hasta ese lugar y determinaron que alguien había pagado con la tarjeta de crédito de Nozzi tres días de estadía y que había dejado un bolso con prendas de vestir del empresario en la habitación.

Si bien en un principio se sospechó que la víctima pudo haber viajado a Paraguay y asesinada en ese país, los voceros creen ahora que otra persona pudo alojarse en ese hotel con su tarjeta y su ropa como coartada.

Una hipótesis a la que apuntan los pesquisas es que Menocchio pudo ser el «nexo» entre traficantes de dinero paraguayos y Nozzi y, además, el encargado de «los contactos», lo que le permitía conocer muy bien los movimientos de su jefe y amigo, así como también las sumas de dinero que manejaba.

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