La Juventud Radical se comprometió reconstruir la síntesis ideológica- práctica que sostiene el partido y juzgaron que «es momento de construir y tenemos la capacidad y la fuerza necesaria para oxigenar, vitalizar a la UCR y convertirla en alternativa», en una reunión resultante de un amplio debate interno y de la charla llevada a cabo el pasado jueves en la sede del partido Radical. La misma contó con la presencia del presidente de la UCR provincial, Raúl Solmoirago, el presidente del bloque de diputados radicales, Luis Giuliani, el presidente del bloque de concejales de la UCR, Jorge Gómez, e integrantes del gabinete de gobierno de la provincia de Corrientes.
Se destacó la asistencia de gran cantidad de jóvenes al evento y de correligionarios de larga trayectoria que asistieron al comité con deseos de discutir las posibilidades de «Construir el radicalismo de mañana.»
En el manifiesto elaborado propusieron:
* Trabajar por una UCR, afianzada y pujante que sea capaz de sostener los principios nacionales, democráticos y progresistas de nuestra identidad histórica.
* Recuperar la capacidad de liderazgo e iniciativa en lo político, con la convicción de generar opinión y conciencia.
* Trabajar en pos del respeto a los derechos fundamentales de todo el pueblo, salud, justicia, trabajo y educación.
* Situar a la UCR al frente del reclamo por una enseñanza gratuita, libre, así como una Universidad pública, gratuita y cogobernada, sosteniendo los postulados de la Reforma de 1918.
* Apuntar a la unión partidaria de manera tal que seamos observados por la sociedad civil, sectores productivos, trabajadores y entidades intermedias, como una organización con vocación de servicio y unidad de criterio.
Un proyecto de país, provincia o municipio, debe contener estrategias de redistribución del ingreso a favor de los sectores populares. Para ello resulta imprescindible recuperar la capacidad soberana del Estado en la ejecución de políticas económicas y sociales.
Nos encontramos frente a un gran desafío que estamos dispuestos a enfrentar, porque nos hacemos cargo de la obligación d encabezar un proceso de cambio para protagonizar la Historia y no mirarla frente a nuestras narices, es tiempo del esfuerzo de todos sin distinciones.
Es tiempo de ir al diálogo y construir juntos el partido grande, el partido del pueblo. Este es el desafío de los tiempos que corren, finaliza el manifiesto radical.
