Arauco paga u$s 300 millones de dólares por activos forestales de Dreyfus

La adquisición local fue por u$s 45 millones e incluye a la dueña de los tableros Faplac, que factura $ 120 millones, y 8.000 hectáreas de plantaciones en el Delta bonaerense

Celulosa Arauco, de la familia chilena Angelini, decidió comprar los activos forestales que el trader de granos francés Louis Dreyfus tiene en la Argentina y Brasil, por 300 millones de dólares, de los que la operación local se llevaría u$s 45 millones.

Para la compañía trasandina, que busca internacionalizarse, la jugada implica fortalecer su presencia en la Argentina, donde ya es dueña de la mayor compañía forestal, Alto Paraná, e ingresar en el mercado brasileño, donde sólo tenía operaciones comerciales.

Si Defensa de la Competencia aprueba la operación, Alto Paraná ingresará al mercado de tableros aglomerados (usados en la industria del mueble), un negocio en el que no operaba. LD Manufacturing –la filial de Dreyfus, dueña de la marca Faplac–, posee alrededor del 30% de ese mercado y, en 2004, facturó unos 120 millones de pesos. Ese negocio, liderado por la también chilena Masisa y en el que participan Guillermina (de Ferrum), Sadepan y Cuyo Placas, entre otras firmas menores, produjo en 2004 un volumen de 467.000 metros cúbicos (m3), por unos u$s 94 millones, de los que se exportaron alrededor de 200.000 m3.

LD Manufacturing tiene una fábrica de tableros de madera con capacidad para 320.000 m3 anuales, en Zárate. También es dueña de una pequeña planta de resinas cerca de Rosario, Santa Fe, cuya producción utiliza como materia prima de los aglomerados. La compra incluye, además, 8.000 hectáreas de plantaciones en el Delta bonaerense y el 60% de las acciones de Flooring, una reciente fábrica de pisos flotantes que tiene la marca Decor Floor.

Alto Paraná produce, en su planta de Misiones, tableros MDF (Medium Density Fiber), también para la industria del mueble pero con usos diferentes al aglomerado. La firma era dueña de 172.000 hectáreas (88.000 forestadas) y un aserradero en Puerto Piray, Misiones, que puede producir 230.000 m3 por año. Tras la compra de PeCom Forestal, aprobada a fin de 2003, sumó 59.800 hectáreas (20.000 forestadas) y un aserradero con 94.000 m3 anuales de capacidad.

En Brasil, la adquisición incluye la totalidad de LD Forest Products, dueña del 100% de la gigante Placas do Paraná y el 50% de Dynea Brasil, que engloba 26.000 hectáreas, una planta de MDF de 250.000 m3 por año, otra de aglomerados de 320.000 m3, y una de resinas de 130.000 toneladas anuales.

Según la agencia Reuters, reproducido por el Diario El Cronista Comercial, Angelini tomó esta decisión en momentos en que su sociedad de inversiones Antarchile estaría cerca de vender su participación en la naviera chilena Vapores por un monto similar, luego de una oferta de corredores locales de bolsa.

Competencia
La operación por la que Alto Paraná se quedaría con los activos foresto-industriales de la francesa Dreyfus debe ser aprobada por Defensa de la Competencia. Si bien la chilena ya es la principal maderera de la Argentina, en el sector se cree que la autoridad antimonopolio no pondrá objeciones, a diferencia de lo que ocurrió con la compra de los activos forestales de PeCom. En aquella operación, firmada el 27 de diciembre de 2002 y valuada en 40 millones de dólares, la dependencia demoró un año en dar su aprobación.

Es que, a días de anunciada, la Federación Argentina de la Industria Maderera (Faima), que nuclea a 20 cámaras de pymes dedicadas a la fabricación de muebles, comenzó a presionar –incluso hasta llegar al entonces presidente Eduardo Duhalde– para que el Gobierno impidiera la fusión, alegando que, de lo contrario, se crearía una empresa capaz de fijar precios unilateralmente.

Ahora, según miembros del sector, Competencia debería tener menos reparos, ya que Alto Paraná ingresa en aglomerados y producción de resinas, dos segmentos complementarios con sus actividades pero en los que hoy no opera.