Procesaron a tres paraguayos por tenencia de armas de guerra

El grupo cayó el año pasado en San Vicente. Se cree que quería cometer un robo Augusto Sotelo (23), Gregorio Olivera (23) y Silvio Olivera (37) fueron detenidos la noche del domingo 19 de septiembre del 2004 en San Vicente. El trío, de nacionalidad paraguaya, habría llegado a Misiones para cometer un asalto. Sin embargo, esa versión no se comprobó y el juez de Instrucción Juan Carlos Cantero los procesó sólo por «tenencia ilegal de armas de guerra».
Fuentes judiciales confiaron que la resolución del magistrado ya estaría firme (la habría avalado el Tribunal Penal de Oberá), por lo que los extranjeros estarían a un paso del juicio oral y público.
En el mismo escrito, el juez imputó también a un adolescente de 17 años, quien habría traído a la Tierra Colorada a los paraguayos, supuestamente para que asaltaran a un ex patrón. Ellos llegaron con una pistola Browning 9 milímetros y un revólver Colt calibre 38.
Por las modificaciones que sufrió el Código Penal luego de las movilizaciones encabezadas por Juan Carlos Blumberg, el ilícito por el que el grupo fue acusado dejó de contemplar la excarcelación. Por eso, tanto los tres sospechosos mayores como el jovencito se encuentran en prisión.
Sotelo y los Olivera se presentaron en la casa del maderero Moisés Rodríguez De Almeida, también presidente de la Asociación Ganadera Alto Uruguay. El grupo le ofreció un campo y dijo que lo había enviado un conocido del hacendado.
Pero De Almeida llamó a su allegado y éste negó que le haya mandado a alguien.
Luego de despedir diplomáticamente a los visitantes, el maderero llamó a la Policía, que detuvo a los paraguayos y al adolescente, quien los habría traído desde Buenos Aires para que asaltaran a su antiguo empleador: el ganadero.

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