El devaluado Poder Judicial

En Misiones cada vez son menos los abogados que prefieren dejar la actividad privada para ingresar a las filas de la Justicia. Opiniones desde adentro y afuera. [su_note note_color=»#cdcdcd»]Un abogado gana más dinero haciendo una sola excarcelación que lo que gana un fiscal en todo un mes[/su_note]Pertenecer al Poder Judicial de Misiones nunca estuvo tan devaluado como ahora. Cada día son menos los abogados de la matrícula que desean hacer la carrera judicial en los tribunales de la provincia. Las estadísticas que se manejan en el Consejo de la Magistratura dejan ver esta cruda realidad.
Los malos salarios, la crisis judicial, y la mala imagen que quedó en la justicia después del estallido de la causa conocida como la megaestafa. Ésas son los principales argumentos que presentan los letrados que ejercen la profesión en forma independiente, a la hora de enumerar los motivos por los cuales prefieren no ingresar al Poder Judicial.
En los últimos cinco concursos que se realizaron en el Consejo de la Magistratura para cubrir las vacantes de juez y defensores oficiales, sólo se presentaron 13 abogados de la matrícula. La mayoría de los concursantes son letrados que ya están dentro de la estructura del Poder Judicial y buscan ir subiendo escalones, cosa que les reditúa económicamente.
«Hay muchos factores. Puede ser que los exámenes son escollos importantes y que incluso ponen en juego el prestigio de los abogados. La falta de vocación creo que es otro de los factores», explicó el secretario del Consejo de la Magistratura, Alejandro Diego Villafañe.
El camarista del fuero Penal, Martín Errecaborde, lleva más de 15 años en el Poder Judicial, y según su opinión las expectativas en el ámbito privado para los abogados «son mayores». «Antes no era así, hoy se gana muy poco y a nadie le conviene», subrayó.
El siguiente caso tal vez sirva como ejemplo. Un abogado gana más dinero haciendo una sola excarcelación que lo que gana un fiscal en todo un mes, incluso hasta podría llegar a duplicar esa cifra.
Un fiscal cobra de sueldo básico 1.995 pesos más un adicional de 500, en total serían, sin contar la antigüedad, 2.495 pesos. «Una sola excarcelación que logra sin mucho esfuerzo un abogado particular puede costar 3.000 de un solo saque», confesó con ironía un fiscal mientras observaba a los judiciales haciendo una nueva marcha.
El básico y el adicional de un defensor oficial de primera instancia es exactamente igual al de un fiscal, aunque la responsabilidad es bastante diferente.
La presidente del Colegio de Abogados, Lilian Roko, no cree que el desprestigio del Poder Judicial sea uno de los motivos que llevan a los letrados del matrícula a permanecer en la actividad privada. «Personalmente creo que tal vez los colegas advierten más chances que estando fuera de la estructura, pero creo que el tema salarial no incide demasiado, es más una cuestión de vocación».

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