El decomiso lo llevó a cabo el Escuadrón 50 de la Gendarmería Nacional, con autorización de la Justicia Federal.
La mercadería tenía como destino a los grandes centros urbanos del país.
Entre los días 15 y 16 de febrero, personal del Escuadrón 50 de la Gendarmería Nacional abrió 267 encomiendas que habían sido retenidas ante las sospechas de que contenían mercancía ilegal. El olfato no les falló a los uniformados, porque en la mayor parte de los paquetes había contrabando por más de 232 mil pesos.
La requisa fue autorizada por el juez federal José Luis Casals y se llevó a cabo en el depósito de la Dirección General de Aduanas de Posadas.
Finalizada la apertura, se labraron 262 partes de contrabando por infracción a la ley 22.415.
Se secuestraron 3.558 cartones de cigarrillos de distintas marcas, por un valor de 113.856 pesos. También mercaderías del rubro telefonía celular y electrónica por 82.898 pesos y gran variedad de ropa de vestir, por 35.880 pesos.
El valor total aproximado de lo decomisado ascendió a la suma de 232.655,60 pesos. El contrabando habría tenido como destino a los grandes centros urbanos de la Argentina.
Según se informó de manera oficial, se redespacharon cinco paquetes a su destino final, por no encontrarse en infracción a las leyes vigentes.
