Brignole anticipó que rematará bienes de morosos y evasores de tasas municipales

El intendente de Posadas señaló que se intimará judicialmente a los que no paguen sus tasas. Se estima que la Municipalidad se pierde de recaudar cerca de 40 millones de pesos. El comercio tiene un 30 por ciento de morosidad y los inmuebles 40.

Balance. Brignole advirtió a morosos y lanzó la re-re de Rovira.

Balance. Brignole advirtió a morosos y lanzó la re-re de Rovira.

El intendente de Posadas, Jorge Brignole, no dudó en responder: “Si tenemos que rematar bienes de morosos y evasores, lo vamos a hacer”. La Municipalidad capitalina intimó judicialmente a cinco mil deudores del Impuesto al Parque Automotor paguen una deuda que alcanza los trece millones de pesos, y tasas inmobiliarias y de comercio que alcanzan los 40 millones. Ése es el principal desafío del jefe comunal para el año que se inicia. Pero no fue el único anuncio que realizó en una extensa entrevista concedida a Radio A: aseguró que se debe discutir la re-reelección del gobernador Carlos Rovira para “darle una oportunidad de gobernar”, en una frase que sacudió el ambiente político de fin de año. La idea de buscar a los evasores y morosos no es propia, ya que los intendentes anteriores también lo habían planteado, pero es la primera vez que se llega a instancias prejudiciales para cobrar. Según Rentas de la Municipalidad, un 30 por ciento de los comerciantes son morosos y el 40 por ciento de los propietarios de inmuebles no pagan sus tasas. Febrero sería el mes clave para las ejecuciones. “Nunca me prendí de los pantalones de nadie para crecer políticamente y eso me ayudó a enfrentar el difícil momento que pasé, cuando por momentos quedé fuera de la intendencia. Fue un momento difícil que no sé si otro intendente pasó, con un paro de transporte, un paro de recolectores de basura, y los dos tercios del Concejo en contra”, señaló a modo de balance de 2004. Brignole dijo que pudo sobrevivir porque ya tiene experiencia en administración. “Lo primero que hicimos fue organizar la municipalidad, reordenar los recursos humanos, que estaban absolutamente desquiciados, producto de la inestabilidad institucional. Estaba quebrada económicamente, pero en función de esto fuimos gastando de acuerdo a lo que se recaudaba”. Destacó que se hicieron inversiones, obras y compras importantes «e inclusive aumentamos el sueldo a los empleados municipales, antigüedad, ticket, título», etc. A la hora de calificar como lo peor que le pasó durante el año, el jefe de la comuna posadeña manifestó que, «lo peor que me pasó fue lo de febrero, eso sí me da vergüenza porque por más que no fuimos nosotros los que llevamos ese camión y volcamos toda la basura, estábamos involucrados porque tenía que ver con nuestra gestión». Además dijo estar satisfecho con algunas de las medidas tomadas como el control del cinturón de seguridad, o el código de nocturnidad: “Creo que la ordenanza de nocturnidad ha cambiado la cara de la madrugada posadeña”, sentenció.

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