Una investigación con demasiados baches

El extenso juicio oral y público dejó en claro que la investigación que inició el juez de Instrucción Eduardo D’Orsaneo y continuaron otros magistrados, está llena de baches.Durante los alegatos, los abogados defensores y la propia fiscal le dedicaron un párrafo a la forma en que se realizó la pesquisa.Liliana Picazo sostuvo que “hubo muchas desprolijidades y la Policía aparece severamente cuestionada por la investigación paralela que realizó el comisario Pérez”.Sin embargo, dejó en claro que “hubo un juez que condujo esa investigación e incorporó las pruebas, que no fueron cuestionadas por las defensas”.La defensora Lilian Belloni, indicó que “hubo irregularidades policiales y desprolijidades judiciales. A la Policía se le escapó un preso rengo por el patio de la comisaría y un oficial dijo que las testimoniales que se tomaban eran dirigidas”.También la abogada Palombo cuestionó el trabajo judicial y policial. “Se perdieron dos horas de filmaciones del casino; se escapó un preso y nadie fue sancionado y la jueza Salvado de Sotelo se quedó con lo poco que había en la causa en vez de seguir investigando”, dijo.Schwertner, en tanto, afirmó que en el juicio “ se intentó pasar por alto irregularidades, parcialidades y subjetividades en la investigación”.Y aseguró que “la investigación paralela sentó las bases para este juicio”. Antes de que el Tribunal pasara a dictar sentencia, su presidente, Roque González dijo que “ninguno de los defensores cuestionó en su momento la validez de las pruebas”.

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