Raptan a hija de comerciante paraguayo en Foz de Yguazú

Una niña de diez años, hija de un comerciante paraguayo, fue secuestrada el jueves de la vivienda de sus padres, en el barrio Jardín América, inmediaciones de la favela Bambú, de Foz de Yguazú (Brasil). Se trata de Andresi Mayara Britos, y los malvivientes serían seis delincuentes que ingresaron a la vivienda portando armas de fuego y se habrían fugado con la pequeña hacia nuestro país. De acuerdo a los primeros informes, exigieron 500.000 dólares para liberarla. El hecho se dio a conocer recién ayer por la mañana, pero ocurrió el jueves, a las 21:30 aproximadamente, cuando seis malvivientes ingresaron a la casa portando armas de grueso calibre, maniataron a la madres de la pequeña, Marcia Barboza, y a su abuela, cortaron las comunicaciones telefónicas y se llevaron a la niña.El padre de la pequeña es Regis Britos, paraguayo pero radicado en Foz de Yguazú hace muchos años. Es propietario de la casa Excel Informática, ubicada en la galería Lai Lai Center del microcentro local. El abuelo de la niña es Arsenio Britos, quien posee una panadería en Foz de Yguazú, acorde a los datos obtenidos de fuentes extraoficiales de la Policía Nacional.Agentes de la Policía Militar de Foz de Yguazú dieron la alarma a sus pares paraguayos minutos después del hecho, ya que los malvivientes se habrían llevado a la niña a Ciudad del Este, cruzando el río Paraná en una balsa asaltada de contrabandistas.Horas después del secuestro, la madre, Marcia Barboza, recibió una llamada telefónica donde los captores exigían 200.000 dólares por la pequeña. Tiempo después, el monto se elevó a 500.000 dólares.Según las fuentes extraoficiales, la Policía brasileña ya habría identificado a los marginales, que serían todos brasileños, excepto un oriental. Uno de ellos tendría como apodo «Viula».Desde el momento en que fue informado el secuestro, agentes de Investigación de Delitos realizan intensos rastrillajes hacia la zona de Presidente Franco, además de establecer custodia en el Puente de la Amistad. Militares de la Base Naval patrullan el río, en un trabajo combinado, según el jefe de Investigaciones, Bernardino Caballero. Familiares de la víctima aseguran que la familia no está en condiciones de abonar el rescate, ya que son de clase media, y piden el apoyo de la población para encontrar a la pequeña.(La Nación Paraguay)