La desnutrición se cobró otra víctima

Una vez más el flagelo del hambre se cobra víctimas infantiles. En horas de la mañana de ayer falleció una beba de tan sólo seis meses a causa de un cuadro severo de desnutrición y deshidratación. Karina Noemi Erikson vivía con su madre y su abuela en el Barrio A-4, manzana 234 casa 24 y se encontraba tendida en una cama cuando los efectivos de Seccional XI de Posadas llegaron a la vivienda a constatar que había sucedido. La niña pesaba alrededor de tres kilos, en tanto su peso debería ser alrededor de nueve kilos, ya que desde su nacimiento debería haber crecido entre 800 gramos y un kilo por mes. Según el parte oficial, su madre Mabel Erikson, de 17 años, se dirigía a la salita del barrio sólo para retirar leche, dado que la niña no tenía médico de cabecera y tampoco había recibido alguna atención en sus meses de vida. No se realizó autopsia porque el médico forense no lo consideró necesario ante el cuadro «evidente» de desnutrición. Si bien aún no hay tasas definitivas de mortalidad por desnutrición infantil, datos extraoficiales señalan que en lo que va del año se registraron más de 50 muertes, consecuencia de esta patología. Asimismo, desde noviembre del año pasado a marzo de 2004 se detectaron 13.119 menores y 1.482 embarazadas con algún grado de desnutrición. Uno de los factores con los que se relaciona estrechamente este problema es la pobreza. En este sentido, Posadas sigue ocupando un lugar entre las ocho ciudades con más familias pobres del país y entre las cinco con más hogares bajo la indigencia.

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