El partido correspondiente a la décima fecha del Torneo Anual Clasificatorio de la Liga Posadeña no pudo empezar debido a un cruce entre ambas parcialidades.
Una vez más, la irracionalidad y la violencia que rodean al mundo del fútbol se hizo presente y obligó a dejar lo deportivo en un segundo plano: Guaraní y Huracán, los dos perseguidores del líder Sporting en la tabla del Torneo Anual de la Liga Posadeña, se enfrentaban en el marco de la décima fecha en un partido que prometía mucho y que debió ser suspendido.
Minutos antes del comienzo del partido, la barra de Guaraní Antonio Franco atacó sin mayor argumento a los hinchas de Atlético Huracán, que se ubicaban detrás del arco que da a la calle Ivanowski. Los barras visitantes, que pasaron en caravana por donde se reunía gran parte de la barra de la Franja, sufrieron piedrazos y botellazos.
Debido a que las fuerzas de seguridad no podían garantizar la seguridad, el árbitro Horacio Cabrera decidió suspender el partido que ibas a disputarse esta tarde en Villa Sarita.
Los damnificados no fueron sólo hinchas, sino que varias casas aledañas terminaron con rompeduras de vidrios, así como también hubo destrozos en autos y motos.
“Es una lástima todo esto que pasó. El partido podría comenzar, pero tememos por la que pueda pasar en la desconcentración de hinchadas después del partido, por eso decidimos suspenderlo”, indicó Cabrera.
La resolución quedará en manos del Tribunal de Penas de la Liga Posadeña de Fútbol.
Anual Clasificatorio: Mitre vapuleó 4 a 0 a Guaraní en el clásico posadeño y se sumó a la lucha de arriba
