Los vecinos escucharon gritar a una mujer. Una, dos, varias veces. Desesperados y sin saber qué es lo que estaba pasando llamaron a la policía para que se acerque a la vivienda ubicada en Carlos Paz, Córdoba.
Cuando los efectivos llegaron se encontraron con un escenario desesperante: en el piso había muchas manchas de sangre y en uno de los dormitorios vieron a una mujer atada en el suelo de pies y manos, ojos vendados, golpeada y amordazada.
«La policía no dudó de hacer uso de la fuerza pública» para reducir al hombre que estaba con un cuchillo en la mano al momento en el que ingresaron.
«El hombre salió a la calle con guantes de látex ensangrentados y un arma blanca diciendo que iba a matar a su mujer», explicó el comisario Leonardo Páez Stelmach.
En el lugar se secuestro una mochila, tres cuchillos, un destornillador, una media, una cinta de embalaje, una botella de vodka, agua oxigenada, un encendedor y guantes de látex.
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