Ocho consorcios internacionales presentaron ofertas para desarrollar Aña Cuá, la obra que incrementará en un 10% la generación de energía de Yacyretá

Así lo confirmó Martín Goerling, director ejecutivo de la EBY, quien estimó que la construcción del nuevo brazo de la central hidroeléctrica le dará trabajo a alrededor de tres mil personas.

Ocho consorcios internacionales comprendidos por 24 empresas presentaron ofertas para realizar la construcción del brazo Aña Cuá en Yacyretá, la obra que promete incrementar en un 10% la generación media anual de la represa hidroeléctrica binacional.

«Estamos iniciando una obra más que importante para el suministro eléctrico de Argentina, teniendo en cuenta que Yacyretá actualmente aporta el 16% de la energía eléctrica que consume todo el país», precisó el director ejecutivo de la EBY, Martín Goerling.

Respecto a la obra en sí, el directivo detalló que «se van a poner tres turbinas más en el mismo embalse de Yacyretá, lo cual va a incrementar un 10% más de lo que ya genera» de energía. Goerling también celebró la amplia participación de empresas de todo el mundo en la licitación, que ahora se encuentra en pleno proceso de evaluación de oferta: «La idea es para fin de año tener los contratos firmados y ya que a principios del año que viene arranque esta obra que va a traer mucha mano de obra», ya que cerca de tres mil personas se verán afectadas laboralmente de forma directa e indirecta durante los cuatro años de construcción del brazo complementario de la represa.

Por otro lado, Goerling ayer se reunió con el presidente electo de Paraguay, Mario Abdo Benítez, con quien ratificó la continuidad de todos los proyectos firmados anteriormente, en particular la aprobación del acuerdo «que ordena financieramente a la entidad y la hace viable para seguir haciendo más inversiones de este tipo».

Finalmente, el director ejecutivo de la entidad consideró que Argentina no está «muy lejos» de regresar al autoabastecimiento energético: «Es parte de la nueva planificación de recuperar la matriz energética que tuvo la Argentina y volver a ser exportadores, pero eso significa volver a tener inversión. Esta es una obra muy beneficiosa desde el punto de vista económico, se hace muy rápido y no hay impacto ecológico».