Posadas: a las 166 viviendas entregadas por el IPRODHA en Itaembé Guazú, se le sumarán otras 200 hacia fin de año

Así lo confirmó el gerente del instituto de vivienda misionero, Juan Carlos Descotte, quien además se refirió al intenso trabajo realizado para titularizar a cientos de misioneros.

Juan Carlos Descotte, LT17

El IPRODHA llevó a cabo este viernes la entrega de 166 viviendas en el barrio Itaembé Guazú de Posadas, todas de tipo Che Roga, «de 58 metros cuadrados, con todos los servicios que podemos pedir en una zona urbana, incluso con conexión de gas con cocina y calefón instalados», explicó el gerente del instituto, Juan Carlos Descotte.

La adjudicación se llevó a cabo en un acto «muy emotivo» que tuvo lugar en el Parque del Conocimiento y que fue presidido por el vicegobernador Oscar Herrera Ahuad, donde también dijeron presente el intendente Joaquín Losada; el presidente del instituto, Santiago Ros; y el director nacional de Acceso al Suelo, Agustín Baldo.

A esta acción, de aquí a fin de año se le sumará en la capital misionera la entrega de más de 200 viviendas y otro tanto durante el primer semestre del año que viene. «Aparte de eso estamos construyendo un barrio de 500 viviendas que nosotros llamamos sustentables, de madera y con todos los servicios, que están destinadas a los sectores de menores recursos», indicó Descotte. Allí tienen planeado «reasentar a algunos asentamientos que están con peligro de ser desalojados por la Justicia o alguna obra pública».

La inclusión de la madera como material de construcción permite no sólo el abaratamiento de costos, sino que también contempla una ayuda a la economía de Misiones, de la cual la madera «es una pata fundamental», por lo que la búsqueda del Gobierno provincial es hacer «la mayor cantidad de viviendas de madera posible».

Por otro lado, el licenciado se refirió a las quejas de beneficiarios del instituto por el aumento de las cuotas, situación sobre la que consideró que «no siempre la gente pone como prioridad en su vida o no le da la importancia que tiene el techo propio, el saber que uno está en su casa y que va a ser para toda la vida».

En ese sentido, reflejó que muchos vecinos prefieren pagar «la cuota del auto nuevo» o «tienen servicio de televisión con el plus de deportes», pero «de golpe, por un aumento en la cuota, se quejan».

«Hay mucha gente que no le da la prioridad o el valor que corresponde a una vivienda, hemos tenido problemas de gente que ha vendido la casa luego de que se la entregáramos. Hay muchos inundados a los que se les dio la casa con su terreno propio y la cambiaron por una moto», recordó.

Además, Descotte precisó que «el IPRODHA está siendo muy prudente en sus aumentos de cuotas. Nosotros siempre tuvimos un aumento anual y este año les dimos quince meses sin aumentos, eso en la economía argentina es una rareza. Encima se efectuó el aumento sobre el índice UVI, que es el valor de la construcción, que es cinco puntos menor al UVA -que es el que está pagando toda la gente que tiene crédito ProCreAr- y cuatro puntos menor a la inflación. Se ha elegido como índice de referencia el más barato».

No obstante, reconoció que la demanda siempre «es mayor a la oferta que podemos ofrecer», aunque pidió a la gente comprensió, ya que «la Provincia de Misiones, a través del IPRODHA, hace todo lo posible en cuanto a construcción de viviendas y a regularización dominial». Respecto a eso último, recordó que el instituto se encuentra llevando a cabo la titularización de asentamientos que son irregulares, tal como sucedió en El Soberbio días atrás.

Ante la creciente demanda, en tanto, el instituto resolvió aplicar un esquema alternativo que promueve la construcción de viviendas en lotes con servicios: «Como hay una demanda que tiene quizá los medios para conseguir un crédito, nosotros les podemos vender con una financiación mucho mejor que cualquiera que esté en el mercado lotes con servicios. Entonces ellos edifican ahí por su cuenta, con sus ahorros o con un crédito. Eso es una franja de la población que tiene un poquito más de medios». La misma solución puede aplicarse a «la otra punta de la población», con menos recursos: «Si a esa persona no le podemos dar todavía la casa, aunque esté planificado, le estaremos dando en forma muy económica lotes con servicios a nombre de ellos para que se muden ahí con lo que puedan. Y después trataremos de ponerle una casita encima, pero ya están en tierra propia, donde nadie los va a echar y donde cada peso que pongan va a ser de ellos».

En términos de financiación, Descotte detalló que los recursos aportados por Nación van destinados a «más de la mitad del costo de las viviendas y hay una contraparte que pone la Provincia», aunque cabe recordar que la administración provincial también debe hacerse cargo de la infraestructura urbana y el amoblamiento -comisarías, las escuelas, salas de auxilio y hospitales-, por lo que «si miramos el resultante de los números, la inversión de la Provincia es mayor que el financiamiento nacional».

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