Es el saldo de otro intenso operativo desplegado por la Dirección General de Seguridad Vial y Turismo, a través de sus divisiones en las 13 unidades regionales de la provincia, durante este fin de semana.
Por graves infracciones 73 conductores perdieron sus licencias: sólo en Oberá se retuvieron 11 en cuestión de horas.
Además, producto de todos los operativos en la provincia, fueron secuestrados 23 automóviles y 43 motocicletas de distintas cilindradas.
En el marco de estos controles, del total de los alcotest realizados, cinco dieron positivo para conductores de distintos vehículos.
A esta hora prosiguen los operativos integrales en rutas y zonas urbanas de toda la provincia. Seguridad Vial y las comisarías locales actúan de manera conjunta.