Crimen del yerbatero: allanaron la casa del sospechoso prófugo y del padre en San Ignacio

«Manolito» Méndez, el joven buscado por el asesinato del empresario yerbatero Bladimiro Pizl (74), ocurrido el sábado en Bonpland, sigue prófugo. Ayer, los investigadores de la Unidad Regional VI de la Policía allanaron su residencia y la de su padre, en San Ignacio. No lo encontraron, pero recogieron testimonios de pobladores de la zona que indicaron que el muchacho habría sido visto en esa localidad.
«Le gusta el monte», le dijeron los pobladores a los detectives, sugiriendo que el joven está oculto en la formación selvática que rodea a la localidad de la reducción jesuítica.
Méndez habría sido visto el sábado por la mañana cerca del acceso a la chacra de Pizl, donde el anciano fue ultimado a golpes, al bajar de su camioneta.
Cuando lo encontraron, el yerbatero presentaba una herida contuso-cortante en la región occipital del cráneo, de unos 7 centímetros de longitud, y otra herida contusa en la región frontal derecha. De acuerdo con la autopsia que se le practicó por orden de la jueza Selva Raquel Zuetta, la causa de muerte fue “traumatismo de cráneo”.
Méndez junto a otros tres muchachos (dos de 21 de Bonpland y uno de 17 de Alem) habrían participado del hecho, que habría tenido como objetivo robarle el dinero (7 mil pesos) que el anciano había llevado a la chacra para pagar a sus peones.
Además de la búsqueda del prófugo, los allegados de la víctima le dieron el último adiós en Alem. Lo velaron entre la madrugada y las 9 y luego lo inhumaron en el cementerio de esa localidad.