Una fiesta llevada a cabo en una casa del barrio Savoia, en la localidad de City Bell, en el partido bonaerense de La Plata, terminó en tragedia: en medio de la celebración, hubo una pelea y dos jóvenes murieron asesinados.
«En esa casa vive una mujer con sus hijos y las novias de ellos, invitaron a vecinos y amigos y la hicieron en un patio», explicó un jefe policial. Todo se sucedió de forma normal hasta las 6 de la mañana, cuando, dicen los voceros, «aparecieron algunos muchachos de otro grupo del mismo barrio».
Según el diario local El Día, por lo que cuentan los testigos, la intención de los recién llegados «no era entrar en la fiesta», sino que se supone que «fueron a generar alguna pelea y rompieron los vidrios» de, por lo menos, un auto que estaba estacionado afuera.
Quienes estaban dentro de la propiedad salieron enfurecidos. En segundos estalló el descontrol, con cruce de piedras, golpes y botellazos, aunque el resultado final demuestra que también se usaron cuchillos. Mientras, los vecinos ajenos a los disturbios llamaban al 911.
Los policías que acudieron en un móvil sin saber la magnitud del problema advirtieron, muy rápido, que necesitarían refuerzos para controlarlo.
«Eran más de 20 personas divididos en dos grupos», contó un vocero que estuvo en la escena y confirmó que, en medio del enfrentamiento, los dos grupos unieron fuerzas para «atacar a los patrulleros y acorralarlos».
Finalmente, por estos hechos fatales fueron detenidas dos personas. Una de las acusadas de apuñalar y matar a un joven es mamá de dos criaturas y está embarazada. Se negó a declarar.
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