Durante los festejos por Año Nuevo hubo un instante que captó la atención de Lucas Landau, fotógrafo de la agencia Reuters. Ocurrió en una playa de Copacabana, de Brasil, mientras un nene negro contemplaba la danza de los fuegos artificiales en el cielo. La escena tomó otro significado ya que detrás aparece un tumulto de personas vestidas de blanco que se mezclan entre la celebración y el jolgorio por la llegada del 2018, mientras que el chico permanece allí solo, dentro del mar, extasiado por lo que ve.
La fotografía rápidamente generó repercusión en las redes sociales y disparó un fuerte debate sobre las diferencias sociales en Brasil. Después de que Landau la publicó en su cuenta de Twitter, fue compartida más de 4.000 veces y recibió casi 16.000 “me gusta”. Y como suele suceder, despertó múltiples interpretaciones. Algunos vieron en la foto diferencias sociales, otros consideraron que el chico, de nueve años, estaba disfrutando del espectáculo, mientras el resto se sacaba selfies. También cuestionaron qué interpretación se daría si el protagonista fuese un nene blanco.
reveillon copacabana, 2018 #lucaslandau pic.twitter.com/hDaOX7S1qS
— Lucas Landau (@lucaslandau) 1 de enero de 2018
En ese marco, el propio fotógrafo prefirió mantenerse a un margen de cualquier suposición y contó cómo fue el momento en que sacó la instantánea. «Yo estaba trabajando, haciendo fotos de gente que veía los fuegos en Copacabana. Y él estaba allí, como los demás, deslumbrado. Le pregunté cuántos años tenía y cómo se llamaba, pero no lo oí por el ruido. Como se había metido al agua (que estaba fría), terminó distanciándose de las personas. No sé si estaba solo o con su familia», dijo en diálogo con el diario El País.
Para Landau todas las interpretaciones de la foto son válidas y legítimas. “Existe una verdad, pero ni siquiera yo sé cuál es”. Desde el punto de vista del poder de la imagen, Verne habló con el fotógrafo y periodista Fernando Costa Netto, dueño de Doc Galeria de fotoperiodismo y fotografía documental, que resaltó la capacidad que tiene una foto de “cambiar la vida de una persona”.
«Es la fotografía derribando presidentes, denunciando hospitales abarrotados, documentando las barbaries de las guerras o mostrándonos lo que ya sabemos: el abismo entre los que van de blanco y el chico sin camiseta en esa foto de Lucas. Aunque la foto diga otra cosa cuando encuentren al muchacho, Brasil aparece muy bien reflejado en la foto de Copacabana. Estamos aquí discutiendo la fuerza y el papel de la fotografía, el prejuicio, el Año Nuevo en Río, la estética, la emoción, el documento, cuestionando… La fotografía está cumpliendo con su papel».
FOTO: Lucas Landau / Reuters.
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