Una mujer policía baleó al novio y luego se pegó un tiro en el corazón

El impactante suceso se produjo en el barrio porteño de Flores, donde la pareja, ambos efectivos de la Ciudad, mantuvieron una discusión. La chica, de 21 años, terminó la disputa atacando a tiros a su compañero, de 22, quien sufrió heridas en el brazo. Luego, la agresora intentó suicidarse con su arma reglamentaria. Quedó internada en estado delicado.

 

Una agente de la Policía porteña atacó a tiros a su novio, también efectivo de esa fuerza de seguridad, e intentó suicidarse, tras una discusión en plena vía pública del barrio de Flores, por motivos que se investigan.

 

El hecho se registró a las 23.45 del viernes en la esquina de las calles Ramón Falcón y José Martí, donde Camila Robledo (21) y Agustín Mattioli (22) se encontraban de guardia.

 

Según indicaron los voceros, entre ellos hubo una pelea por motivos que no trascendieron y la chica disparó con su arma reglamentaria hacia su novio, quien huyó del lugar tras la agresión, perseguido durante unos metros por Robledo, que luego regresó a la esquina.

 

Mientras el efectivo herido escapaba, fue visto por efectivos de la comisaría 40ª que patrullaban la zona, quienes constataron que presentaba una herida en el brazo derecho, aunque no de gravedad, y se dirigieron al lugar donde comenzó el hecho. Allí observaron a la joven, quien al notar la presencia del patrullero se disparó en su pecho, a la altura del corazón, y cayó herida al suelo.

 

Las fuentes agregaron que los efectivos se comunicaron de inmediato con el servicio de emergencias SAME, cuyos médicos constataron que la joven presentaba una herida de bala con orificio de salida, y que la lesión de su novio no era de riesgo, por lo que fue dado de alta luego de realizarle algunas curaciones en la ambulancia.

 

En tanto, Robledo fue trasladada de urgencia al Hospital Médico Policial Churruca, donde le diagnosticaron que el balazo no le había provocado daños en sus órganos internos.

 

El juez en lo Criminal y Correccional 41, Ricardo Farías, dispuso la intervención de la Gendarmería (GNA) para el secuestro del armamento de los policías involucrados, así como para la realización de las pericias correspondientes.

 

El magistrado caratuló la causa como «abuso de armas, disparo de arma de fuego y lesiones», y dispuso las demás diligencias correspondientes para avanzar con la investigación.

Fuente: Télam

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