El 1 de octubre pasado, una tormenta de gran intensidad azotó la localidad del Norte Misionero y sus alrededores, dejando a más 150 viviendas afectadas por voladuras de techos, varios días sin luz, ni agua, a toda la localidad. Varios días incomunicados y grandes pérdidas económicas. Gracias a la colaboración de varias instituciones publicas y actores anónimos se pudo normalizar la situación con el correr de los días, aunque todavía se pueden ver los destrozos en algunos sectores del pueblo.
Tal es así que hoy 1 de Noviembre varios vecinos siguen disconformes y molestos debido a que los postes de telefonía aún siguen en el mismo lugar que hace un mes.
Tampoco hay personal trabajando para normalizar el tendido. En las imágenes se pueden apreciar como un poste telefónico impactó el techo de una casa, y su cableado peligrosamente está a pocos centímetros del piso, cruzando de esquina a esquina, sin ningún tipo de señalización, lo cuál representa un peligro para los conductores y transeúntes.
Otros postes se encuentran con su cableado recostado al lado de una parada de colectivos cercano al ingreso del pueblo, lugar muy concurrido por personas de todas las edades.
Un mes después de haber soportado uno de los mas fuertes temporales en años, el pueblo volvió a la normalidad, pero sus vecinos reclaman la presencia de personal de la empresa de telefonía para comenzar las obras aunque aún no han tenido respuestas.
