Una muchacha de 15 años murió ayer, luego de estar varios días internada, presuntamente por una ingesta excesiva de cocaína que le provocó severos daños cerebrales. El marco de la intoxicación habría sido una fiesta a donde asistió la muchacha, en el barrio Patono de la capital correntina. La familia asegura que le habrían colocado algo en la bebida y que además también fue golpeada.
Pese a las graves sospechas que fueron vertidas en la prensa por los familiares damnificados, tras las consultas realizadas a la Policía para conocer los detalles de la causa penal se especificó que el expediente aún está caratulado como “averiguación de delito”, con lo cual las pericias aún intentan dilucidar de si existió algún crimen contra la muchacha.
Asimismo se consultó por las lesiones descriptas por los allegados, ante lo cual se indicó que serían de vieja data por lo que se presume que el fallecimiento se habría debido a los daños provocados por la sustancia alucinógena, en el cuerpo de la menor.
Lo cierto es que la chica estuvo internada poco más de una semana.
La madre relató que una noche de sábado, la chica le dijo que iba a salir a una fiesta de 15. Según le comentó la menor, lo haría en compañía de dos amigas.
Sin embargo, alrededor de las 8 del domingo un joven en motocicleta fue hasta la casa de la jovencita y le avisó a la madre que su hija estaba internada en el Hospital Escuela.
Ante la conmoción de la novedad, la progenitora le pidió al extraño que la lleve hacia el mencionado nosocomio.
En el camino, la madre dijo que le preguntaba por lo que había pasado, pero que el motociclista no contestaba. “(El) no me decía nada, no me respondía. Solo me contó que llevó a mi hija al hospital, que la ayudó y que ella le mordió la mano cuando quiso ayudarla”.
No fue mucho el tiempo en el que la joven estuvo internada en el Escuela, ya que por su edad se decidió que fuera trasladada hacia el hospital Pediátrico.
La madre comentó que los médicos acusaron severos daños cerebrales a causa de un consumo excesivo de cocaína.
Asimismo, la progenitora no pudo especificar el lugar donde se desarrolló la fiesta. Tampoco conocía a la joven que fue agasajada en la oportunidad.
“Ella tenía golpes en todo el cuerpo, como si hubiera querido defenderse y la trompearon hasta dejarla inconsciente”.
Otro dato que se supo en cuanto a las lesiones es que algunas se habrían encontrado en la zona occipital, es decir parte de la nuca.
El caso está siendo llevado en la comisaría Decimosegunda, por asuntos de jurisdicción.
Hasta el momento no habría elementos certeros que apunten a que la menor habría sido engañada u obligada para que ingiera alguna sustancia.
Vale aclarar, con respecto a la muerte, que primeramente hubo versiones contradictorias que se conocieron en la prensa con respecto al deceso.
Si bien primeramente se había dicho que la joven había muerto, desde una emisora local aseguraron que en realidad se trató de una confusión ya que la menor tendría “muerte cerebral”, por lo que la familia realizó una mala interpretación. Sin embargo, se consultaron a las autoridades que llevan adelante la causa penal y confirmaron que la joven dejó de existir. Según se aseguró, la muerte se produjo alrededor de las 10:30, producto de un paro cardiorespiratorio. Otro dato que despejó dudas fue que se indicó que el cuerpo de la adolescente fue llevado hacia el Instituto Médico Forense, con la finalidad de que se realice la correspondiente autopsia para conocer las causas de la muerte.
En paralelo, los allegados de la jovencita indicaron que incluso fueron amenazados para que no denuncien del caso ante la Policía. Quienes habría efectuado las intimidaciones fueron identificados como “El negro” Moro y “Yeye”, aunque no se explicó el porqué de las amenazas. (Diario Época)