La mujer que mató a sus dos hijos fue internada en un hospital psiquátrico. El padre de los nenes había advertido que temía a lo que pudiera hacer su ex.
El martes a la madrugada Nadia Gisel Fucilieri escribió una carta dedicada al padre de sus hijos. “Hijo de puta, ahora vas a sentir culpa. Vas a pagar por cada gota de sangre de tus hijos”. Luego, agarró un bisturí y fue hacia la habitación de los pequeños.
A Marcelino, el más grande, lo asesinó dormido; mientras que Pía tiene signos de haberse defendido. Inmediatamente después, la mujer de 29 años intentó suicidarse, sin éxito.
Según se supo, la mujer quedará internada en un hospital neuropisquiátrico hasta que los médicos puedan estabilizarla y poder tomarle declaración. Los investigadores temen que pueda volver a atentar contra su vida.
LA HISTORIA PREVIA
La historia trágica de Nadia y Aldo Martínez data de algunos años atrás, cuando la pareja se separó.
«Vas a pagar por cada gota de sangre de tus hijos», escribió la mujer antes de asesinarlos
En enero de este año, la mujer logró que se dicte una orden de restricción por violencia de género por haberle arrojado un vaso de gaseosa en el rostro a la mujer. Aldo, a pesar del dolor, no vio a sus hijos durante esos nueve meses.
Hace algunas semanas atrás, Nadia y Aldo tuvieron una nueva audiencia para tratar de resolver el conflicto judicial que tenían. Ella había iniciado un juicio por alimentos, mientras que él exigía un régimen de visitas para volver a ver a sus hijos después de nueve meses.
En ese momento no se logró llegar a un acuerdo porque ella, por recomendación de su abogada, no aceptó los $15.000 que ofreció pagar el padre de los niños. Allí se había ordenado un exámen psicológico que se realizó este martes, en donde se había constatado que la mujer trataba bien a sus hijos.
Horas más tarde de la pericia y sin haber llegado a un acuerdo, Nadia Gisel Fucilieri decidió terminar con la vida sus dos hijos de 4 y 2 años.
Según declaró la abogada de Aldo Martínes, papá de de los nenes, el hombre había advertido en varias oportunidades que tenía miedo de lo que su ex podría hacerle a sus hijos. “Y ahora qué me dirán en la Justicia. Todo lo que intenté hacer no sirvió de nada porque nadie me escuchó”, dijo Aldo cuando vio los cuerpos de sus hijos.
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