Secuestro de los hermanitos mbya: el captor abandonó a su suerte a los niños cuando se sintió cercado por los policías

No se sabe qué intenciones tenía. Pero el hombre de 36 años que secuestró a sus sobrinos de 6 y 7 años de la comunidad mbya Tacuaruzú de El Soberbio abandonó a los niños cuando se sintió cercado por los policías misioneros y brasileños. Prácticamente los abandonó a su suerte, en un campamento de trabajadores rurales del paraje Coqueros, en las afueras de la localidad de Itapiranga, Brasil.
Los niños habían hecho alrededor de 30 kilómetros de la comunidad donde residen. Estaban bien de salud, pero con mucha sed.
Los uniformados fueron siguiendo los pasos del prófugo gracias al testimonio de vecinos. Así llegaron hasta el obraje, donde vieron ropa de criaturas. Entonces se apostaron a esperar. Pasaron unas cuantas horas, hasta que el secuestrador apareció, con los chicos. Sin embargo, el hombre se percató de que estaban cerca de atraparlo y huyó. Conocedor de la zona, se escabulló. Los pequeños se quedaron en el lugar.
Justina y Nicolás fueron abandonados en una zona de monte. Lo primero que hicieron los policías fue socorrerlos. Poco después empezaron el regreso a casa.
Lo que actualmente sigue es el operativo para dar con Víctor Chamorro Da Silva.