Nutrición: Beneficios de consumir panificados integrales

Los productos integrales como panes, galletitas y pastas son elaborados con una parte de harina común, refinada y otra, de harina integral, la cual es elaborada a partir de los granos enteros de trigo o, bien, con agregado de salvado, que es la parte más superficialque recubre el grano.

 

La adición de este tipo de harinas a los panificados hace que éstos tengan mayor contenido de fibras, pero, sin embargo, no modifica la cantidad de grasas, hidratos de carbono o proteínas del producto terminado, por lo tanto, el aporte de calorías es el mismo. A partir de estos datos podemos afirmar que la clásica idea de que todo lo integral no engorda es más bien un mito, pues consumir pan o galletitas de este tipo nos aportan las mismas calorías que los panificados blancos, pero cabe destacar que nos brindan un mayor aporte de fibras, la cuales tienen múltiples beneficios para la salud como:

 Favorecer el tránsito intestinal, ayudando a quienes padecen de constipación.

 Regular los valores de glucemia, por lo cual es fundamental para personas que padecen diabetes o resistencia a la insulina.

 Interfiere en la absorción del colesterol y ayuda a eliminarlo, favoreciendo a la salud cardiovascular.

 Da mayor saciedad, con lo cual consumimos menor cantidad de alimentos. Este aspecto es importante para el tratamiento del sobrepeso y la obesidad, donde generalmente controlamos la cantidad de panificados a consumir por día.

 Los granos enteros aportan mayor cantidad de vitaminas y minerales que las harinas refinadas.

Entonces, la recomendación para estos alimentos es consumirlos diariamente respetando las mismas porciones indicadas para los demás panificados. En un adulto sano, de peso normal, se indica 2 porciones diarias (cada porción estándar: 5-6 galletitas, o 2 rodajas de pan tipo molde, 3 tostadas, 2 cucharadas de cereales para acompañar lácteos, entre otros), especialmente para el desayuno y merienda, evitando su ingesta con las comidas del almuerzo y cena. Hay que aclarar que las porciones exactas deben ser indicadas de manera individual para cada persona, ya que todos tenemos necesidades calóricas diferentes, pues esto es a modo general.

Otro aspecto de suma importancia es que hay diferentes patologías que, debido a sus características y sintomatologías digestivas, impiden el consumo de cereales integrales, porque los mismos pueden acentuar las molestias del paciente, tales como gastritis, diarreas crónicas, síndrome de intestino irritable, problemas hepáticos, entre otros. Es por ello, que siempre recomendamos consultar con un profesional para asegurarnos una alimentación saludable y adecuada a nuestras necesidades y características.

 

Lic. Romina Krauss

M.P.n°147

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas